El mejor Leo Messi está de vuelta

Una victoria más para el Barça de Luis Enrique. Y ya van once consecutivas, las mismas en las que paró la marca el Barça de Pep Guardiola el año del triplete. El fondo es el mismo pero la forma es diametralmente distinta. Era aquel un equipo que rumiaba y rumiaba cada jugada y es éste uno con más gusto por el contragolpe. Pero en uno y en otro hay algo que coincide, Leo Messi. Messi por encima de todo y todos.

La ‘Pulga’ hizo esta vez tres goles, que pudieron ser cuatro si el árbitro no le hubiese anulado otro por un fuera de juego que no hubo cuando en el marcador lucía 1-0, y dio la asistencia de otro a su amigo Neymar.

El argentino ya lleva 26, los dos primeros los hizo con su pierna derecha -su pierna mala, dicen- y el tercero, de penalti, con la zurda. Es, además, el Messi más risueño que se recuerda porque ha encontrado a su socio perfecto, Neymar, ante el que incluso llega a disculparse por un balón no pasado o un pase errado.

Ambos, junto a Mascherano, fueron los únicos que repitieron esta vez con respecto al once de la Copa en una pequeña revolución de Luis Enrique. El invento le salió bien al asturiano porque en el Camp Nou esta tarde todo fueron sonrisas, en la cancha y en la grada -se llegó a corear incluso el nombre de técnico asturiano-.

Los azulgranas golearon a un Levante que salió bravo al Camp Nou  porque a los cinco minutos de partido tuvo una oportunidad Barral después de una buena jugada de Xumetra, pero se acababa de cumplir el primer cuarto de hora de juego cuando el Barça marcó el primero y desniveló el duelo. Un pase sublime de Messi encontró a Neymar, que con un remate cuanto menos raro, marcó el primero de los azulgranas. Una asistencia más del Messi más generoso de los últimos tiempos.

No le perdieron la cara al partido los levantinistas porque el juego de los catalanes era algo rancio y espeso a pesar de ese gol, pero cada vez que Messi y Neymar se miraban pasaba algo. Pasó en el minuto 37 cuando en una contra protagonizada por ambos, Messi marcó, pero la jugada se anuló por un fuera de juego que no fue.

Sólo un minuto después el argentino sumó su primero después de un pase al hueco de Bartra. El segundo llegó al cuarto de hora del segundo acto. Esta vez sólo tuvo que empujar un buen pase de Pedrito, que se disfrazó de karateca para hacer un pase imposible. Su tercero, el cuarto del equipo, llegó de penalti.

Se sucedieron entonces los mejores minutos de los de Luis Enrique. Tuvieron precisión, velocidad y fluidez. Pusieron la velocidad de crucero. Y aún cayó un gol más. Uno espectacular y soberbio de Luis Suárez, que esta vez se quedó de inicio en el banco. El charrúa cazó un balón dentro del área y, con un remate entre volea y chilena, hizo el gol más vistoso de una tarde redonda en el Camp Nou.

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