La industria se precariza: los contratos duran dos meses de media

Madrid

La industria, el sector considerado más estable tradicionalmente en términos de contratación, no escapa a la creciente precarización del mercado laboral español. Un estudio de la federación de metal y construcción de UGT (MCA-UGT) muestra –a partir de datos oficiales- cómo la duración de los contratos industriales ha caído de 157 días de media en 2010 a 60 en 2015. Un deterioro que el sindicato atribuye a las sucesivas reformas laborales implantadas desde entonces, primero la del PSOE (2011) y luego la del PP (2012).

Los datos oficiales de Empleo con los que MCA-UGT hace su análisis muestran que aumentan los contratos en la industria, pero que su duración se desploma. Entre enero y mayo de2015 se firmaron 750.139 contratos en el sector, más del doble que en el mismo periodo de 2010 (360.749). Sin embargo, la duración de estos contratos cae más de la mitad: de 157,16 días de media en 2010, frente a los 60,81 días de 2015. Unos datos que al sindicato le llevan a concluir que no se está generando empleo, sino que se reparte lo que hay vía precariedad.

Este deterioro en la duración de la contratación aproxima al sector industrial a uno de los considerados más precarios: el de la construcción, muy aquejado por la temporalidad tradicionalmente. En los primeros cinco meses de 2015, la duración media de los contratos en este sector ha sido de 53,78 días (frente a los 73,55 días de 2010). La conclusión es ineludible: frente a las diferencias de antes, industria y construcción se igualan vía precariedad, puesto que ahora tanto en uno como en otro sector los contratos no pasan de los dos meses de media.

MCA-UGT señala que el número de contratos temporales es una evidencia clara de este deterioro: los contratos temporales han crecido más del doble en el periodo 2010-2015, de 305.912 a 683.194. Nueve de cada diez contratos firmados en el sector industrial durante 2015 fueron temporales, a imagen de lo que sucede en el conjunto de la economía. Dentro de esa contratación temporal, la que más ha repuntado ha sido la que menos dura: los contratos eventuales por circunstancias de producción, que han triplicado su volumen entre 2010 y 2015 y han visto cómo su duración se reducía a la mitad, hasta los 41,06 días.

Además, señala el sindicato, uno de cada cuatro contratos en la industria de los firmados durante 2015 ha tenido una duración menor de siete días, mientras que hace cinco años esta situación sólo se daba en el 7% de los contratos. Ante estos datos, MCA-UGT reclama al Gobierno un giro en las políticas económicas, centrándolas en el empleo de calidad y el aumento de la inversión productiva.