El instructor que investiga a Mas votó a favor de admitir la querella a trámite

Madrid

La decisión de investigar la consulta del 9N no fue fácil. Las 15 querellas y 80 denuncias interpuestas con motivo de la consulta soberanista acabaron en el Tribunal de Justicia de Cataluña que decidió abocarlas a pleno. Lo hizo porque el contenido de todas ellas era similar y había que evitar resoluciones contradictorias entre las distintas salas.

Los seis magistrados votaron y decidieron admitirlas a trámite. Las fuentes jurídicas consultadas por la Cadena SER subrayan que el debate se suscitó en términos estrictamente jurídicos sin carga política alguna y que ninguno de los magistrados entró en el fondo de la cuestión. Las querellas se admitieron por cuatro votos a favor y dos en contra. A favor votaron el magistrado instructor, Joan Abril, José Francisco Valls, Carlos Ramos y María Eugenia Alegret. En contra lo hicieron el presidente del Tribunal de Justicia de Cataluña, Miguel Ángel Gimeno y Enric Anglada.

Las dudas de la Fiscalía

La decisión de presentar la querella tampoco fue fácil. La Junta de Fiscales de Cataluña no apoyaba la medida y tuvo que intervenir el entonces Fiscal General del Estado, Eduardo Torres Dulce. La cúpula de la carrera fiscal en Madrid le apoyó. Solo dos de los veinticuatro fiscales de sala no le respaldaron.

La Fiscalía General del Estado atribuye al presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas, y a sus estrechas colaboradoras en el gobierno, Irene Rigau y Joana Ortega, los delitos de desobediencia, prevaricación, malversación de caudales públicos y obstrucción a la Justicia o usurpación de funciones públicas. La querella relata que la Generalitat "desplegó una conducta incompatible con la prohibición del Tribunal Constitucional de celebrar la consulta soberanista porque el proceso prosiguió hasta su consumaciónn del día 9 de noviembre".