Un imputado “agraviado” con los 3.500 euros al mes de Olivas pide equiparar su asignación
El exdirector general de Bankia Hábitat, José Cortina, considera insuficientes para afrontar los “gastos de subsistencia” de su familia los 2.200 desbloqueados por el juez Juan Pablo González, y reclama 3.000 al mes para acercarse a la cantidad que este magistrado permitió al expresidente de la Generalitat valenciana del PP, de Bancaja y Banco de Valencia, José Luis Olivas
La clemencia del juez de la Audiencia Nacional Juan Pablo González al desbloquear 3.500 euros mensuales de las cuentas de José Luis Olivas, acusado de hundir Bancaja y el Banco de Valencia por los créditos fraudulentos concedidos a empresarios de la construcción, ha provocado que cunda el ejemplo entre otros imputados y formulen peticiones similares. Ninguno se conforma con un salario mileurista.
Es el caso del exdirector general de Bankia Hábitat, José Cortina, imputado como Olivas en la causa por la que se investigan los créditos del proyecto urbanístico mexicano Grand Coral, quien ha presentado un escrito al magistrado, que avanza la SER.
En el texto, Cortina se queja de que los 2.200 euros mensuales desbloqueados para sus gastos personales suponen “un agravio comparativo” con las medidas “autorizadas a otros imputados en este procedimiento por importes superiores”, en referencia a la cantidad de 3.500 al mes permitida a Olivas, o los 4.700 del también exdirector general, Tomás Codoñer.
Un “agravio” que Cortina considera “arbitrario, ilógico o carente de motivación”. El exdirector de Bankia Hábitat, quien tiene que afrontar junto a Olivas, Codoñer y otros tres directivos el pago de una fianza de responsabilidad civil de 232,7 millones de euros por hundir la entidad, se queja de que con los 2.200 euros mensuales no puede vivir.
En concreto, sostiene que con ese dinero tiene dificultades “para atender los pagos de gastos ordinarios, algunos básicos y de subsistencia, incluidos aquellos propios de la familia del Sr. Cortina, su cónyuge, Dña. Concepción Pernía, y de la madre de esta”. Y es que, según recuerda el imputado, su suegra “también reside en el domicilio” familiar.
Por ello, José Cortina asevera que “los gastos en los que incurre precisan del desbloqueo por el importe de 3.000 euros mensuales solicitado”.
El juez desbloqueó las cuentas de los directivos con la oposición de la fiscal anticorrupción Elena Lorente, quien era partidaria de permitir tan solo una asignación mensual de 648 euros, equivalente al salario mínimo interprofesional. La fiscal alegó que la justicia no es responsable de que los imputados adquirieran compromisos de gasto “por encima de sus posibilidades”.
La gestión de Olivas y del resto de directivos implicados en Bancaja y el Banco de Valencia está plagada de supuestas irregularidades, con créditos concedidos a empresarios amigos por encima de los 500 millones de euros, que, tal y como les contó la SER, evadieron parte del fraudulento pelotazo obtenido en el proyecto Grand Coral a cuentas en Suiza y Andorra, y correspondieron a Olivas con viajes gratuitos a Cuba en jet privado.