El caso de María

Madrid

El diagnóstico de un cáncer a una edad nada habitual puede tener amargas consecuencias. Nos lo contaba María que a los 22 se notó un bulto en el pecho que cada día le dolía más. Acudió a médicos y especialistas de la sanidad pública y privada sin que nadie diera con el diagnostico ni le hicieran una mamografía. Tuvo que esperar un año para que en urgencias le hicieran la prueba y una biopsia. A los tres días le dieron el resultado: cáncer de mama. Aún se pregunta si un año antes el diagnóstico habría sido el mismo. Eñ cáncer de mama en mujeres jóvenes requiere de unas ayudas específicas fundamentañmente las relacionadas con una futura maternidad. Lo habitual, según los expertos, es quer a la paciente le informen sobre las posibilidades que tiene para congelar óvulos o som eterse a otro tipo de tratamientos. María nos cuenta que a ella en ningún momento le ofrecieron esas posibilidades. "Me dijeron que no podría tener hijos y ya está".