Suspiro de alivio en Europa tras la victoria de Van der Bellen en Austria

Viena

Ha sido una contienda reñida, una campaña electoral que ha asustado a algunos austriacos porque han visto a dos candidatos insultarse. Sí, insultarse, porque se han llamado mentirosos y vagos entre ellos. Algo nunca visto en televisión. Podía llamarse ultra, de extrema derecha, pero esos conceptos políticos eran viables. Ahora, el candidato del FPÖ ha reconocido sentirse triste, pero dispuesto a seguir trabajando y no tirar la toalla porque le queda mucho por delante.

"Ha sido un año difícil, con sus luces y sombras, subidas y bajadas. No quiero olvidarlo, sino aprender de él para el futuro", ha afirmado Hofer para posteriomente añadir para añadir otro mensaje: "felicito sin paliativos a Alexander Van der Bellen por la victoria conseguida y pido a todos los austriacos un sigan unidos y trabajando juntos".

Muy diferente este al discurso al que ha venido defendiendo durante toda la campaña. También nos ha sorprendido a los periodistas del sur de Europa ver a los dos, a Norbert Hofer y Van der Bellen, darse la mano en los pasillos de esta sala de prensa incluso antes de comparecer conjuntamente en un plato de televisión.

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Una sala de prensa que precisamente el gobierno austriaco suele alquilar para actos públicos en la que no hace mucho tiempo Alaska y Mario estuvieron pinchando como DJ's música de los años 80 y 90 auspiciados por una marca multinacional. Hoy ha acogido a centenares de periodistas extranjeros, el mayor número de acreditaciones que ha visto el ministerio de Información austriaco, para un evento político aquí en Austria.

Van der Bellen no ocultaba su satisfacción. Ha dicho que es una victoria clara y no como la de las otras elecciones, que no deja lugar a dudas de lo que quieren los austriacos. "Los resultados de estas elecciones son una señal de que mis posiciones proeuropeas son compartidas por la mayoría de los votantes (...) Quieren un futuro solidario, integrado en la Unión Europea, trabajando juntos por este país y con una estrategia de futuro recta", ha sentenciado. .

La campaña del líder austriaco de ultraderecha, Norbert Hofer, ha ya reconoció su derrota en las elecciones presidenciales de Austria tras ver los primeros sondeos. Un reconocimiento que Hofer hizo en primer lugar en las redes sociales donde ha pedido que "todos los austriacos trabajen juntos" porque "no importa lo que decidimos en las urnas".

Las presidenciales austríacas han tenido que ser repetidas después de que Hofer y el ultranacionalista Partido Liberal de Austria (FPÖ) impugnaran en mayo pasado los comicios, ganados por una diferencia mínima por Van der Bellen. El Tribunal Constitucional austríaco invalidó esas elecciones y ordenó una repetición por haber registrado irregularidades formales en el recuento del voto por correo.