La ciudad alemana de Tréveris acepta una estatua de Marx, su hijo más ilustre

Berlín

La ciudad alemana de Tréveris ha recibido un regalo comprometido, a tenor de la polémica que ha generado entre sus apenas 100.000 habitantes. La República Popular China ha expresado al municipio su deseo de regalarle una estatua de grandes dimensiones del filósofo Karl Marx, uno de los padres espirituales del comunismo, para que sea erigida en 2018, año en el que se cumplen dos siglos de su nacimiento.

Hasta Tréveris ha llegado el boceto de la impresionante estatua, que mide 6,30 metros pedestal incluido, diseño del artista chino Wu Weishan, quien según su proyecto debería colocarse cerca de la Porta Nigra, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Sin embargo, el origen del regalo ha sembrado la discordia entre quienes consideran inaceptable un icono semejante por parte de un régimen político que no respeta los derechos humanos, y quienes lo ven como un modo de situar Trier en el mapa y revitalizar el turismo de cara al próximo año.

Al final, el Consejo de la Ciudad ha decidido poner fin a la controversia y dirimir el asunto mediante la votación de sus miembros: 42 de ellos votaron aceptar el regalo de la República Popular China, 7 se pronunciaron en contra y 4 se abstuvieron. La ubicación, el tamaño final y los costes de la instalación de la estatuta aún no se han decidido, y se conocerán después de nuevas conversaciones con China. El alcalde de Tréveris, Wolfram Leibe (SPD), considera que se trata de una oportunidad para estrechar lazos con el gigante asiático y un modo de visualizar la vinculación de Trier con su más ilustre paisano.

Karl Marx, uno de los padres del comunismo, nació el 5 de mayo de 1818 en Tréveris en el seno de una familia judía de clase media. Fue un filósofo, intelectual y militante comunista. Junto a Friedrich Engels, es el padre del socialismo científico, del comunismo moderno y del marxismo. Sus escritos más conocidos son el Manifiesto del Partido Comunista (en coautoría con Engels) y El Capital.