Una aerolínea estudia eliminar los asientos de sus aviones para ahorrar costes

Madrid

La aerolínea colombiana 'VivaColombia', caracterizada por sus vuelos a precios reducidos y sus ofertas, busca nueva maneras de reducir costes y de hacer frente a la gran demanda que están viviendo durante los últimos meses. Debido al incremento del turismo internacional, el director general y fundador de la compañía, William Shaw, ha concedido una entrevista al Miami Herald, donde ha hablado sobre los planes de futuro de la compañía.

Recientemente, y debido a la gran demanda, la compañía ha optado por adquirir 50 nuevos Airbus 320. Debido al alto coste de esta acción, la empresa low cost busca formas de optimizar su servicio de cara al futuro, tal y como ha asegurado Shaw.

"Consideramos la opción de volar de pie"

Una de las ideas que está planteando la compañía es la posibilidad de acabar con los asientos de sus aviones. Tal y como explica Shaw, la compañía está muy interesada en todo aquello que reduzca el precio de sus billetes: "La gente está buscando en internet viajes en los que puedas volar de pie. Y nosotros estamos muy interesados en todo aquello que reduzca el precio de los billetes".

Esta idea, lanzada por Airbus en 2003, y que posteriormente sería secundada por compañías como Ryanair en 2009, llega ahora a la compañía colombiana, que plantea sentar a sus pasajeros en bancos y en sillas altas para que puedan sentarse durante el despegue y el aterrizaje.

"La gente tiene que viajar como seres humanos" 

Mientras tanto, el director general de la Aeronáutica Civil, Alfredo Bocanegra, explicaba hace unos días a RCN Radio que no es viable que los aviones lleven pasajeros de pie: "La gente tiene que viajar como seres humanos. Cualquiera que haya viajado en transporte público sabe que viajar de pie no es lo más indicado".

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"La forma idónea para viajar es hacerlo sentado puesto que otorga un mínimo de comodidad", explica Bocanegra. No obstante, la compañía VivaColombia, con el objetivo de recuperar los casi seis millones de euros en pérdidas que registró en 2016, se plantea cualquier cosa, incluso acabar con los asientos de sus pasajeros.