Casi el 40% de españoles desayuna mal
Apenas uno de cada cuatro realiza un desayuno completo, según la Fundación Española de Nutrición
El desayuno ideal debe aportar el 20-25% de energía e incluir, al menos, lácteos, cereales y fruta
La mitad de los adultos desayuna solo, lo que convierte esa comida en peor nutricionalmente
Imagen cedida por Gullón
Madrid
Los españoles desayunamos. Es un hábito bien asentado en nuestra cultura, lo practicamos casi todos (el 85%) pero, a pesar de venerar el placer del desayuno, lo hacemos mal y no estamos dispuestos a corregirlo. El último informe presentado este martes por la Fundación Española de la Nutrición refleja que casi 4 de cada 10 personas (38%) empieza el día con una ingesta de alimentos insuficiente o inadecuada.
Apenas un 25% de la población adulta realiza un desayuno completo y el 37% lo hace de forma aceptable. Para considerar adecuada esta primera comida del día debe cumplir estos requisitos: aportar entre el 20-25% de las necesidades energéticas e incluir, al menos, tres grupos de alimentos. La mayoría (58%) combina algo líquido -un café, té, leche, cacao- con galletas o cereales y un 3% sigue sin desayunar nada.
Los niños, quienes mejor desayunan
Paradójicamente, más de la mitad de los niños de 6 a 9 años realizan un desayuno "aceptable". Superan en 17 puntos porcentuales a los adultos. En cambio tienen la tasa más baja de todos los grupos de edad en desayuno "completo", un 24%, y esto es fundamentalmente porque apenas toman un 10% de fruta. Su entorno también es el mejor: hacen esa comida en casa y en familia.
"Esa tendencia se va perdiendo en los adolescentes", reconoce el doctor Gregorio Varela -presidente de la FEN- y en la edad adulta "aproximadamente el 50% desayunan en soledad, y tenemos evidencia de que eso implica que se haga peor desde el punto de vista de la densidad nutricional, especialmente en los más mayores".
En cambio, los niños son quienes tienen un perfil calórico más desequilibrado. Toman azúcares añadidos por encima de lo recomendable tanto en la infancia como en la adolescencia.
