124 millones de personas necesitan ayuda urgente para no morir de hambre
Naciones Unidas advierte que 51 países se enfrentan en estos momentos a emergencias nutricionales
Los conflictos y la inseguridad seguían siendo las razones principales del hambre en 18 países, donde casi 74 millones de personas con inseguridad alimentaria necesitan asistencia urgente
(Getty Images)
Madrid
“Alrededor de 124 millones de personas en 51 países se enfrentan a una situación de Crisis de inseguridad alimentaria o peor y requieren una acción humanitaria urgente para salvar vidas” es el dato alarmante que han hecho público hoy las agencias de Naciones Unidas especializadas en la lucha contra el hambre.
El Informe mundial sobre crisis alimentarias 2018, que analiza las situaciones más graves, es complementario al que presenta la FAO (la agencia de Naciones Unidas para la agricultura y alimentación) habitualmente en septiembre sobre el estado mundial de la desnutrición. Centrado en los 3 tipos más graves (equivalente o superior a la fase 3 del IPC/CH) de los 5 en los que se miden las crisis alimentarias, este dossier de datos ha sido presentado en Roma, donde se encuentran las sedes del Programa Mundial de Alimentos y de la FAO, y que refleja un “panorama muy negativo en la lucha contra el hambre” según el sistema humanitario de la ONU:
El aumento en el número de personas que se enfrentan a la desnutrición aguda, (el estadio más cercano al riesgo de muerte por las enfermedades aparejadas al hambre) es de 16 millones de personas con respecto al mismo informe del año anterior. Pero haciendo un seguimiento a los países que aparecen en las dos ediciones del informe, 45 en total, “revela un aumento de 11 millones de personas – un aumento del 11 por ciento – en el número de personas afectadas por la inseguridad alimentaria que necesitan acciones humanitarias urgentes en todo el mundo” en esos países que ya sufrían hambre extrema hace 2 años.
MAPA DE LAS PEORES CRISIS DEL HAMBRE EN EL MUNDO / FUENTE:FAO Y PMA
Conflictos y clima
“Este aumento se puede atribuir en gran medida a la aparición o la intensificación y cronificación de conflictos y de situaciones de inseguridad en países como Yemen, el norte de Nigeria, República Democrática del Congo, Sudán del Sur y Myanmar. La sequía persistente también jugó un papel importante, causando cosechas reducidas consecutivas en países de África oriental y meridional que ya conocían altos niveles de inseguridad alimentaria” se detalla en el informe en el que han participado más de una docena de organismos públicos y agencias humanitarias.
Las peores crisis alimentarias de 2017 tuvieron lugar en el noreste de Nigeria, Somalia, Yemen y Sudán del Sur donde cerca de 32 millones de personas fueron afectadas por la inseguridad alimentaria y necesitan una asistencia urgente, de hecho en Sudán del Sur se decretó hambruna, la segunda de este siglo. “Más niños y mujeres necesitan apoyo nutricional en comparación con 2016 y 2017. Se observó un aumento principalmente en las zonas en conflicto o inseguras como Somalia, Sudán del Sur, República Democrática del Congo, Yemen y el norte de Nigeria” advierten los expertos.
LISTADO DE LOS PAÍSES MAS CASTIGADOS POR EL HAMBRE EXTREMA / FUENTE:FAO Y PMA
El caso de Yemen es el más extremo con 17 millones de personas que sufren a día de hoy una crisis alimentaria Le siguen en esta triste clasificación la República Democrática del Congo con 7,7 millones de personas con una nutrición muy deficiente, seguido de Afganistán con 7,6 millones. La mitad del total de 124 millones de personas se encuentra en países afectados por conflictos o inseguridad en África, y más de un tercio están en Medio Oriente. Los desastres climáticos – principalmente la sequía – también fueron desencadenantes principales de crisis alimentarias en 23 países con más de 39 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria, describe el informe.
2018 con peores perspectivas
“Los conflictos y la inseguridad probablemente seguirán siendo los principales motores de las crisis de seguridad alimentaria en 2018, afectando a Afganistán, la República
Centroafricana, la República Democrática del Congo, el noreste de Nigeria y la región del Lago Chad, Sudán del
Sur, Siria y Yemen, así como Libia y al Sahel central (Malí y Níger). Yemen continuará siendo el país afectado por la mayor crisis alimentaria. Se espera que la situación se deteriore, particularmente debido al acceso restringido, el colapso económico y los brotes de enfermedades”, prevé el informe para lo que resta de año.
Un pequeño hueco para la esperanza se abre en los países del sur de África donde “se pronostica una situación mejor que en 2016/17 gracias a la producción excepcional de cereales en 2017 y la caída de los precios de los alimentos” dicen los expertos que han elaborado estas previsiones.
En todo caso, la conclusión principal de este informe alerta de que “no se espera una mejora significativa en la seguridad alimentaria a nivel mundial hasta que no se logre la paz y se restablezcan los medios de vida” señala.
