Batalla por los cuadros del Palau de Justicia de Barcelona

Madrid

Justicia y arte libran una particular batalla estos días en el Consejo General del Poder Judicial. Este jueves, la comisión permanente del órgano de gobierno de los jueces estudiará una propuesta para hacerse cargo de siete cuadros que desde hace más de cien años cuelgan en las paredes del Palau de Justicia de Barcelona, en el Passeig Lluís Companys: la Generalitat quiere devolverlos al Museo del Prado y el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya quiere quedárselos. 

Los siete cuadros de la discordia presiden algunas de las estancias más solemnes del Palau que vio sentarse en el banquillo a Artur Mas o Leo Messi: el despacho del presidente de la Audiencia Provincial, el del fiscal superior de Catalunya o la sala de vistas del Tribunal Superior de Justicia. Cuadros que datan, en su mayoría, del siglo XIX y que la Generalitat de Catalunya quiere devolver al no poder asumir las condiciones de conservación que exige el Museo del Prado. 

El caso ha terminado en manos del Consejo General del Poder Judicial después de que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya haya mostrado su "interés máximo" en retener los cuadros "por su plena identificación con los espacios que vienen ocupando desde hace más de un siglo". El departamento de Justicia de la Generalitat decidió levantar el depósito de las obras al entender que "las condiciones de conservación no son asumibles, al no reunir el Palau las condiciones de un edifico destinado a funciones museísticas" después de un informe en ese sentido de la jefa del Servicio de Museos del departamento de Cultura del ejecutivo catalán. 

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La Generalitat quiere devolver los cuadros, el Tribunal Superior de Justicia quiere quedárselos y el CGPJ apoya a los jueces catalanes: la comisión permanente estudia este jueves un informe del vocal José María Macías Castaño, al que ha tenido acceso la Cadena SER, y que aboga por asumir el depósito, firmar nuevos convenios con el Prado y ajustar las condiciones de mantenimiento de los cuadros para evitar "incomprensión o mala interpretación" de esta decisión por parte de la Generalitat. 

El "prestigio" de la Justicia 

El vocal que firma la propuesta que este jueves estudia y votar la permanente del Consejo entiende que "resultaría inadmisible" que el Palau de Justicia perdiese estos cuadros después de un siglo "desde el punto de vista del prestigio y presencia de la administración de justicia en Catalunya" y propone que se estudie la posibilidad de que "este Consejo asuma el depósito de las obras de arte que la Generalitat de Catalunya ha expresado su voluntad de abandonar". 

Desliza la propuesta que el organismo "no duda de que puedan existir motivaciones económicas" detrás de la decisión de la Generalitat de prescindir de los cuadros, pero "a este Consejo le preocupa que el desconocimiento de las circunstancias que llevan a remover el depósito genere incomprensión o mala interpretación y que erróneamente se identifique con una desconsideración por parte de la Generalitat al carácter representativo que el Palacio de Justicia debe necesariamente tener en Catalunya".

El texto propone solicitar un informe al Gabinete Técnico para que "con la mayor urgencia" analice la posibilidad de que el propio CGPJ asuma el depósito de estos siete cuadros, así como el firmar un convenio con el Museo del Prado "para articular las condiciones de ese depósito". En caso de que el informe recomiende seguir estos pasos, el vocal también propone que se contacte con el Prado para analizar las condiciones y las "medidas mínimas imprescindibles y provisionales que hayan de adoptarse hasta su firma".