Año negro para el periodismo mundial: más de 60 profesionales muertos y 300 encarcelados
Estados Unidos, México, Siria, India, Afganistán o Yemen son algunos de los países donde más asesinatos se producen
Madrid
Los asesinatos de Jamal Khashoggi, Jan Kuciak o Javier Ortega no han sido los únicos durante este 2018. En su Balance Anual, Reporteros Sin Fronteras, elevaba a 63 la cifra de periodistas han sido asesinados por haber ejercido su labor informativa, además de 13 periodistas ciudadanos y 4 colaboradores. En 2017, fueron 65 los asesinados.
Más información
De esos 80 periodistas, 77 han sido hombres y 3 han sido mujeres, siendo un 55% en zonas de conflicto armado y un 45% en zonas de paz. Estos 63 periodistas profesionales asesinados elevan la cifra de muertes hasta las 702 desde 2009.
Estados Unidos, México, Siria, India, Afganistán o Yemen son algunos de los países donde más asesinatos se producen, siendo considerados para RSF como “los más letales”.
En el apartado de los periodistas profesionales encarcelados, la cifra asciende hasta los 179, mientras que periodistas ciudadanos y colaboradores suman 169 encarcelaciones. Reporteros Sin Fronteras sitúa principalmente en Turquía, Irán, Arabia Saudí, Egipto y China, “las mayores prisiones del mundo para los periodistas”.
Por último, hay un total de 60 periodistas secuestrados, 45 de ellos profesionales. El Estado Islámico, los Hutíes, y otros grupos como Al Qaeda, Haya Tahrir al Sham (HTS) o autoridades autonómicas no reconocidas se encuentran, en líneas generales, detrás de estos secuestros.
“Los actos violentos contra los periodistas alcanzan un nivel inédito este año: todos los indicadores están en rojo”, ha declarado Christophe Deloire, Secretario General de Reporteros Sin Fronteras.
Peor que Samoa, Ghana o Surinam; así está la libertad de prensa en España según Reporteros Sin Fronteras
Reporteros Sin Fronteras publicaba en abril la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa. Aquí analizaban la situación del periodismo en 180 países. España, en 31ª posición, se sitúa por detrás de países como Samoa, Ghana, Surinam o Namibia. Además, nuestro país ha caído dos posiciones con respecto a la clasificación de 2017.
Las variables que la organización tiene en cuenta para determinar ese nivel de libertad de prensa son varios. Desde el pluralismo hasta la independencia de los medios de comunicación, sin olvidarse del ambiente y la autocensura, del marco legal, de la transparencia y, como no, de las agresiones.
A nivel europeo, España se sitúa ocupa el 14º lugar, mejor que Eslovenia, Francia o Gran Bretaña entre otros. Por su parte, Noruega, Suecia y Países Bajos ocupan el pódium. Sin embargo, cuatro de los cinco países que han sufrido un descenso más grande son europeos.
La clasificación de España puede sorprender, pero Reporteros Sin Fronteras la argumentó en varias situaciones ocurridas en nuestro país durante el 2017. La primera de ellas es la situación en Cataluña. “En medio de un clima pleno de tensiones, un gran número de periodistas de medios de comunicación no independentistas padeció violentas agresiones en las redes sociales” detallan en su informe. Añaden también los ataques a los reporteros mientras cubrían los acontecimientos de distinta índole.
Por otro lado, Reporteros Sin Fronteras mostró también su preocupación con la detención de los periodistas turcos , Hamza Yalçin y Dogan Akhanli, “perseguidos por razones políticas” por el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
En cuanto a la “Ley Mordaza”, la organización no profundizaba, pero incidía en que “sigue sin ser abrogada y continúa representando una fuerte amenaza para la libertad de prensa”.
No obstante, el informe también extraía alguna conclusión positiva de la situación en España. En este sentido, avalan la decisión del Tribunal Constitucional de anular algunos aspectos de la ley de RTVE. Un hecho visto desde Reporteros Sin Fronteras como un “freno a la manipulación de la información difundida por la televisión pública”.