"Voy a joderles un rato en TripAdvisor": la respuesta de algunos simpatizantes de Vox al cocinero gallego Pepe Solla

Madrid

La crispación política está llegando hasta la cocina y, a veces, con deplorables consecuencias. Molesto con las exigencias de Vox en Andalucía respecto a la ley de violencia de género, el cocinero gallego Pepe Solla decidió compartir la imagen de un cartel que había colocado en su restaurante de Poio (Pontevedra), distinguido con una estrella Michelin. Y el mensaje, publicado el pasado 4 de enero en la cuenta de Instagram del establecimiento, no dejaba lugar a dudas: "Espacio libre de violencia de género y de Vox [esto último, añadido a mano]".

Una opinión valiente porque, como sucede con los futbolistas, la mayoría de los cocineros con exposición mediática suelen evitar significarse políticamente. Una tendencia de la que Pepe Solla lleva años desmarcándose sin ningún problema. Pero, en esta ocasión, algunos simpatizantes de Vox han optado por vengarse de forma ruin: "Voy a joderles un rato en TripAdvisor", respondió en Twitter @mighuerts.

Y no fue el único. El propio Pepe Solla ha compartido en Instagram varias capturas de comentarios en redes sociales e incluso en la web de calificación de restaurantes TripAdvisor. Comentarios con los que se pretende boicotear al restaurante descalificando su oferta: "Parece que solo se sirve comida a personas de una ideología política". "Gente pasota, hay que llamarles la atención para que te atiendan". "Restaurante con perroflautas, mal servicio y mal todo".

Casa Solla es, para muchos, el mejor restaurante Galicia, por lo que parece poco probable que el boicot de unos cuantos simpatizantes de Vox pueda llegar a afectar al negocio. De hecho, muchos otros usuarios de redes sociales han declarado su intención de ir a comer pronto al restaurante, como muestra de apoyo.

"Los cocineros también somos personas y podemos opinar", ha declarado este lunes Pepe Solla en Hora 25. "A veces es difícil medir las consecuencias. No buscaba polémica. Solo quería mostrar mi opinión sobre un caso muy latente. Creo que tenemos la responsabilidad de denunciarlo e imaginaba que levantaría ciertas discordancias, quizá tampoco tanto, pero no pasa nada. Todos los restaurantes y todos los lados deberían ser espacios libres de violencia de género".