Nueva Ley del Deporte: Igualdad, apoyo al deporte inclusivo y transparencia
El Consejo de Ministros aprueba el anteproyecto de la nueva Ley del Deporte, que actualiza la legislación vigente, de 1990
El ministro de Cultura José Guirao, durante la rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministro / ANGEL DIAZ (EFE)
Madrid
Avances en igualdad, apoyo al deporte inclusivo y mayor gobernanza en las entidades deportivas son las líneas maestras del Anteproyecto de la nueva Ley del Deporte, aprobado este viernes en Consejo de Ministros. Un texto con el que se pretende actualizar la legislación actual, que data del año 1990.
Una de las principales líneas del texto se basa en la protección real y efectiva del deporte femenino, que no aparecía reconocido en la Ley de 1990. Se contemplan medidas que fomentan la paridad en los órganos de dirección, gobierno y representación de las entidades deportivas y se establece un porcentaje mínimo de participación del 40% para las mujeres de manera obligatoria.
Con el fin de proteger la maternidad, las deportistas mantendrán su derecho de voto en las federaciones y su condición de Deportista de Alto Nivel una vez transcurrido el periodo estipulado, que se amplía a los 4 años, manteniendo así su derecho a percibir ayudas y subvenciones aunque no hayan competido.
También se contempla en la ley la obligatoriedad de otorgar las mismas cuantías económicas en los premios en cualquier competición en la que se haya aportado dinero público, bien por medio de las instituciones del Estado, de comunidades autónomas o de ayuntamientos. Las federaciones deportivas tendrán el deber de poner en marcha una comisión de género que de forma anual remitirá un informe al Consejo Superior de Deportes.
El objetivo de estas medidas, señala el Ministerio de Cultura y Deporte, es acabar con la desigualdad efectiva a todos los niveles en materia de género, medidas que también se extienden al colectivo LGTBIQ.
Otras de las aportaciones de la ley: se fija una nueva clasificación de deportistas, se añade un catálogo de derechos y deberes, se hace un reconocimiento legal de la labor de técnicos deportivos y árbitros, que podrán ser considerados deportistas de alto nivel, y se regula la figura del voluntariado. También se regula la protección al menor deportista, cuidando su imagen y la sobreexplotación en competiciones en edades tempranas.
Se añade una nueva tipología de competición intermedia, entre profesionales y aficionados, para favorecer estructuras suficientemente fuertes para pasar de una categoría a otra y se fomenta el apoyo al deporte inclusivo al reconocerlo por primera vez de interés general.
Finalmente, las federaciones y las ligas profesionales deberán dotarse de una Comisión de Control Económico, como órgano independiente de los órganos de gobierno, que informará anualmente al Consejo Superior de Deportes.
A las entidades deportivas se les obligará a elaborar un Código de Buena Gobernanza y Transparencia, que incluirá una limitación de mandatos de los órganos directivos. En este sentido, el ministro de Cultura y Deporte ha apelado a la "madurez" de las federaciones: "Pensamos que las federaciones son lo suficientemente maduras para autorregularse. Le decimos que tienen que poner límites, pero no establecemos que sean dos, tres o cuatro. Estoy seguro de que harán una cosa razonable. No creo que metan diez o quince mandatos".
El anteproyecto será examinado ahora por las federaciones, partidos políticos, entidades, clubes y ciudadanos a lo largo de este mes de febrero y, tras pasar por el Senado, "en un mes y una semana" regresará al Consejo de Ministros para su aprobación definitiva, según ha explicado Guirao.
