La llamada de socorro de la funcionaria judicial el 20-S: "Sácame de aquí"
Este miércoles declaró Montserrat del Toro, funcionaria del juzgado 13 de Barcelona que también investiga el procés
Tendrá que dar detalles sobre cómo transcurrieron los registros de la operación Anubis en la Consellería de Economía
La secretaria judicial que coordinó el registro en la Consellería de Economía relata cómo salió de allí a través del teatro continguo: "Tenía miedo". / ATLAS
Madrid
Este miércoles el tribunal que juzga el procés escuchará uno de los testimonios que puede resultar clave en la acusación por rebelión: el de Montserrat del Toro, trabajadora del juzgado 13 de Barcelona que el 20 de septiembre de 2017 ejecutaba uno de los registros de la operación Anubis. Tendrá que confirmar si las 60.000 personas que protestaban frente a la Consellería de Economía, como dicen las acusaciones, impidieron el registro y obligaron a abandonar el edificio por un tejado o si, como dicen las defensas, podría haber salido por la puerta sin problemas.
Ella ha explicado, mientras los acusados negaban con la cabeza desde el banquillo, cómo no pudieron abandonar el edificio en ningún momento del día ante la presencia de miles de personas. Ya por la noche se asomó por la terraza: "Me asomé a la esquina que forma el edificio y lo que vi, muchas plantas más abajo, era un mar de gente que nos esperaba a la salida de la puerta principal", dice.
Los detenidos no pudieron estar presentes, ha dicho, porque las condiciones planteadas por Jordi Sànchez a la Guardia Civil "no eran asumibles". Salir por la puerta como le ofrecieron "no era una opción segura y no lo acepté". Llamó al magistrado que había ordenado los registros y le imploró: "Me tienes que sacar de aquí, no podemos salir por la puerta principial y no hay salida".
Finalmente accedieron al Teatro contiguo a través de una azotea acompañada de dos Mossos de paisano. Allí "sólo quedaban los actores" y fueron "corriendo, con mucho disimulo corrimos hasta el primer vehículo no logotipado oculto detrás de unas furgonas de los Mossos d'Esquadra". Preguntada sobre si tuvo miedo, ha contestado que "tuve preocupación todo el día y miedo, como cualquier ser humano, tuve a partir de la nueve y media cuando vi lo que había fuera".
Del Toro ha atribuido a los 'Jordis', sobre todo a Jordi Sànchez, el papel de interlocutor con la Guardia Civil y también a la intendente de los Mossos d'Esquadra, Teresa Laplana, la decisión a primera hora de la mañana de no hacer un perímetro de seguridad.
Testimonio clave
Se trata de un aspecto fundamental para las acusaciones a la hora de demostrar que las movilizaciones espoleadas por los acusados tenían por objetivo impedir los registros judiciales. Para la Fiscalía ese día tanto Jordi Sànchez como Jordi Cuixart hicieron "incendiarias convocatorias" cuyo resultado "quedó lejos de la pacífica actuación" que preconizan ahora en el juicio. Ese día, para la Fiscalía, hubo un "asedio" con 60.000 manifestantes y la comisión judicial "se vio privada de su libertad de movimientos al tener impedida la entrada o salida de los agentes del edificio durante las largas horas que duraron los incidentes".
Según la Fiscalía, esta letrada de la administración de justicia tuvo que salir del edificio a través de una azotea y saltando un muro de metro y medio, y según los acusados el trabajo de la comisión judicial no se vio entorpecido, pudiendo haber salido a través de la puerta principal por el pasillo de voluntarios habilitado por la ANC. "No hubo ni una incidencia, la comitiva hizo toda su labor. Yo no obstaculizo, ni los voluntarios ni los manifestantes, a la comitiva judicial", ha dicho Jordi Sànchez en este juicio.