Casado se enreda con sus declaraciones sobre el salario mínimo: asegura que lo bajará si gobierna pero luego lo niega

Madrid

A primera hora de este miércoles, el líder del PP, Pablo Casado, ha señalado que si gobierna, situará el salario en 850 euros, que fue lo que en su día pactó el gobierno de Rajoy con la patronal y los sindicatos pero, cuando Pedro Sánchez llegó a Moncloa, estableció el salario mínimo en 900 euros, que es lo que está en vigor actualmente. "Lo que haré es cumplir la negociación a la que llegó el Gobierno con la patronal y los sindicatos para subir el SMI a 850 euros en 2020 y respetando la subida del año pasado del 4% y del anterior al 8%. Lecciones de política social al PP, ni una. Dejamos un pacto y ellos lo aceleraron y subieron 50 euros y ¿para qué? Pues para crear el paro que se ha creado en enero porque las empresas necesitan esa negociación colectiva para adaptarse", ha señalado Casado en una entrevista en la radio.

Horas más tarde, ante la prensa, el candidato a las elecciones generales del PP ha querido matizar sus palabras y ha explicado que su intención es sentarse con los agentes sociales para decidir qué hacer. Se ha mostrado molesto con una posible mala interpretación de sus palabras que ha querido aclarar: "¿Quién ha dicho que voy a bajar el SMI? ¿Es la fake news de la semana? Yo no he dicho eso. Revisen las declaraciones. Lo que he dicho es que nosotros, nada más llegar al Gobierno nos sentaremos con patronal y sindicatos, lo que debería haber hecho Sánchez. Y que la izquierda no me va a dar lecciones de política social ni de subir el salario mínimo interprofesional, que lo hemos subido el año pasado un 4%, el anterior un 8%. Y porque de acuerdo con los sindicatos y la patronal ya habíamos aprobado una subida, 850 euros, para el año 2020. Yo no he dicho lo que voy a hacer porque necesito escuchar a sindicatos y patronal", ha dicho en declaraciones a los medios previas a su visita al campus Google.

La subida del salario mínimo a 900 euros ha sido una de las medidas estrella del gobierno de Pedro Sánchez y ha supuesto el mayor incremento desde 1977. El Gobierno buscaba de esta forma, según palabras del presidente, "impugnar la devaluación salarial" de los últimos años a causa sobre todo de la crisis económica.