Salir al súper con niños, sí o no: voces expertas opinan tras la medida anunciada por el Gobierno
A partir del próximo 27 de abril, los menores de 14 años podrán acompañar a los adultos a hacer la compra u otras gestiones que ya estaban permitidas
Una mujer prueba a dos niñas una mascarillas para que puedan utilizarlas a partir del próximo lunes 27, tras el anuncio del Gobierno de que los menores de catorce años podrán acompañar a un adulto en las actividades que ya permite el estado de alarma, como ir al supermercado, a la farmacia o al banco. / Salas (EFE) (EFE)
Madrid
La portavoz y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha anunciado este martes en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros una decisión que se venía debatiendo desde hace días, la de permitir que menores de edad puedan salir acompañados durante un tiempo determinado mientras se mantenga el confinamiento.
Los detalles y limitaciones que baraja el Gobierno para poner en marcha esta medida a partir del próximo 27 de abril, presentados por la ministra, han causado discrepancias entre la población, que esperaba una flexibilización mayor tras las palabras de Pedro Sánchez el pasado sábado, que aseguró que sería "un rato al día" y que los niños "necesitan oxigenarse".
<p>Los niños podrán salir acompañados de forma "controlada" al supermercado, a la farmacia o al banco. Los menores de 15 a 18 años podrán salir a hacer tareas comunes, como comprar el pan o el periódico</p>
Tras la reunión del Ejecutivo en el Consejo de Ministros, Montero ha asegurado que los menores podrán acompañar a un adulto en las actividades que ya estaban permitidas para estos últimos, es decir, hacer la compra y otras gestiones, eso sí, "sin límite temporal". La medida ha abierto el debate en redes sociales, en el que también participan voces especialistas.
"El peor lugar para un niño"
El virólogo Raúl Ortiz de Lejarazu se muestra contrario a que sean los supermercados y establecimientos abiertos los lugares a los que puedan acudir menores. Lejarazu ha apuntado a través de su cuenta de Twitter que se trata de sitios “donde hay cierta concentración de personas”, lo que conlleva “máxima probabilidad de contactos”.
Así lo considera también Heike Freire, investigadora y docente experta en infancia. Para Freire, “el supermercado o la farmacia es el peor lugar donde ahora mismo puedes llevar a un niño”, por lo que insta al Gobierno a rectificar ya que considera que la medida “no pone el cuidado y los derechos de la infancia en el centro”.
Salir con una finalidad
Sin embargo, la Asociación Española de Pediatría (AEP) ya consideraba que al igual que el resto de la población, los más pequeños continuaran en casa de momento. Su presidenta y jefa del Servicio de Pediatría y Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario Infantil La Paz de Madrid, María José Mellado, apuntaba el pasado 14 de abril en una entrevista para Europa Press que “es prudente y deseable que, mientras la autoridad sanitaria mantenga el confinamiento para frenar la pandemia, la población infantil y juvenil debe cumplirla igual que el resto”.
En la línea de lo que establece el Gobierno, la pediatra y secretaria de la AEP María García-Onieva señalaba el pasado lunes en Hora 25 que, pese a que “los más pequeños son los que más necesitan salir” considera importante que esa salida “tenga una finalidad como ir a la farmacia o a comprar el pan”.
García-Onieva recomienda a madres y padres que aprovechen estos días para explicar a sus hijos que, aunque “podrán correr y saltar, habrá que mantener la distancia de seguridad y no saludar como lo hacían antes”.
En una entrevista para El País, el doctor Antonio Moreno, jefe de sección de Neumología Pediátrica del Hospital Vall d'Hebron en Barcelona, explica que aún se desconoce si los niños son grandes contagiadores como con la gripe, ya que "las pruebas que tenemos hasta ahora se han destinado a estudiar a los adultos enfermos".
No obstante, Moreno se mantiene cauteloso y afirma que su confinamiento tiene sentido, pues precisamente porque se desconoce cómo actúa el virus en los más pequeños, hay que asumir que estos "pueden ser grandes transmisores, porque una de las cosas que más ha contribuido a que se extienda el virus es la capacidad de diseminarse desde personas que no tienen ningún síntoma. Y este podía ser el caso de los niños".
