Georgia: un pequeño país gran ejemplo en la lucha contra el coronavirus
Las personas infectadas por coronavirus no llegan al millar y han muerto once personas
Está previsto que Georgia abra sus fronteras a los turistas extranjeros a partir del 1 de julio
Madrid
Georgia, un pequeño país localizado en la encrucijada de Asia occidental y Europa del Este, se ha convertido en un modelo para los pasos dados en la lucha contra la pandemia del coronavirus. Según los datos oficiales, el número de personas infectadas por coronavirus no llega al millar y han muerto once personas (todos personas mayores y personas con enfermedades crónicas). ¿Cómo ha logrado prevenir la propagación del virus con tanta efectividad?
El estado de emergencia, que fue declarado por su Gobierno el pasado 21 de marzo, estará en vigor hasta el 22 de mayo. Georgia reabrió esta semana sus comercios tras dos meses de cierre y las autoridades han permitido la entrada y salida de la capital, Tiflis, aunque sigue sin funcionar el transporte público, incluido el metro, y en todo el país continúa en vigor el toque de queda desde las 9 de la noche a las 6 de la mañana. Además, está previsto que Georgia abra sus fronteras a los turistas extranjeros a partir del 1 de julio.
Las medidas adoptadas por Georgia
"Aunque Georgia estuvo bastante lejos del epicentro de esta enfermedad geográficamente, pronto supimos que solo era cuestión de tiempo que el virus llegase al país", dijo la ministra de Salud, Ekaterine Tikaradze. Desde principios de enero, el Ministerio de Personas Desplazadas Internamente de los Territorios Ocupados, Trabajo, Salud y Asuntos Sociales de Georgia, tomó medidas concretas para mitigar la amenaza impuesta por la epidemia. Se lanzó una campaña informativa en aeropuertos y fronteras. Tras la llegada, los pasajeros recibieron información sobre cómo reconocer los síntomas del virus y dónde buscar ayuda si sospechan que se han contagiado. Poco después, el control de la temperatura comenzó en la frontera. Además, los pasajeros de países de alto riesgo fueron puestos directamente en zonas de cuarentena para vigilancia.
Junto con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Georgia actuó de acuerdo con su propio protocolo, que se ha convertido en uno de los factores más importantes para prevenir la propagación del virus en el país. Quienes entran en el país con temperaturas relativamente bajas, como 37,5°, fueron llevados a un centro de salud local y se les hicieron las pruebas relativas al virus.
Además de estas medidas, a finales de enero, la ministra de salud Ekaterine Tikaradze emitió una recomendación para restringir el viaje a China. Algunos días después, los vuelos directos a China se suspendieron. Georgia pronto cerró sus fronteras a países de alto riesgo y luego a todos los países.
Un mes antes de detectar el virus en el país, Georgia ya tenía capacidad para identificar y diagnosticar el COVID-19. El primer caso de coronavirus en el país se registró el 26 de febrero. Hoy, solo hay 333 casos activos.
La principal estrategia que evitó la propagación del virus en Georgia fue el aislamiento de cada caso confirmado o sospechoso. Además, las campañas para ayudar a elevar la concienciación pública sobre la importancia del distanciamiento social y estar en casa han sido muy útiles. Para prevenir la propagación del virus y notificar rápidamente a quienes hayan estado en contacto con alguien que se haya contagiado, el Ministerio de Salud introdujo la aplicación de teléfono móvil 'Stop COVID'. El papel de la aplicación estuvo en colaboración con la ONG austriaca NOVID20 y Dolphin Technologies, una compañía de software altamente innovadora.
Según el Ministerio de Salud, los esfuerzos del ministerio se dirigieron a reducir la curva del virus mientras se aprovechan todos los recursos del sistema sanitario para lograr este objetivo. "Nuestro objetivo es evitar llegar a un pico viral y crear una planicie, que ayudará al sistema sanitario de Georgia a soportar el impacto del COVID-19 y permitirnos tratar a todos los pacientes y garantizar su recuperación.
Georgia ya piensa en el turismo
Georgia ya está empezando a aflojar las medidas que tomó para contener el virus. Sin embargo, el Gobierno señala que elevar todas las restricciones y volver a la vida normal depende de la tasa de reproducción del virus (Rt). "Sabemos muy bien que la manera más efectiva de luchar contra el virus es mantener el distanciamiento social y seguir las normas de higiene estándares. La tasa Rt es directamente proporcional a la observancia de estas normas. Esta es la única forma en que podemos gestionar el proceso y no romper el umbral crítico de nuestro sistema sanitario. Si el indicador Rt baja a menos de uno, las restricciones se levantarán una a una. Sin embargo, si la tasa aumenta, tendremos que reforzar las medidas de respuesta inmediatamente", señaló la ministra de Salud de Georgia.
La respuesta a la pandemia de Georgia se ha citado como uno de los mejores y más efectivos ejemplos en términos de control de la pandemia. Georgia tiene previsto recuperar el turismo interno desde el 15 de junio y abrir sus fronteras a los turistas extranjeros a partir del 1 de julio. El país pretende explotar el sello libre de COVID-19 para atraer al turismo extranjero a una zona relativamente nueva en los circuitos turísticos internacionales. Las autoridades locales suman la buena gestión realizada para controlar la pandemia a sus atractivos turísticos, como la región Adjara, cuya capital, Batumi, se sitúa en la orilla del Mar Negro y es una de las zonas más atractivas del país en gastronomía y turismo urbano y rural.