Dimite el primer ministro francés y abre la puerta a una remodelación del gobierno de Macron

París

El primer ministro francés, Édouard Philippe, ha presentado este viernes su dimisión al presidente, Emmanuel Macron, que la ha aceptado, lo que abre la puerta a una remodelación en el Gobierno. Philippe y el actual equipo seguirán gestionando los asuntos corrientes hasta que se nombre un nuevo Ejecutivo, indicó el Palacio del Elíseo en un comunicado. Philippe, mucho más popular que Macron, podría ser confirmado a la cabeza de un nuevo Gobierno mañana o pasado, aunque varias fuentes señalan que se marchará a Le Havre, donde acaba de ganar las elecciones para asumir la alcaldía.

El presidente de Francia ha designado como nuevo primer ministro a Jean Castex, responsable de gestionar el levantamiento progresivo de las restricciones adoptadas para hacer frente a la pandemia de coronavirus. Tiene 55 años, fue secretario general adjunto de la Presidencia en la época de Sarkozy. Según un comunicado previo del Elíseo, los ministros salientes seguirán en funciones hasta que se complete la renovación.

Una nueva fase tras la pandemia

La especulación de que, en efecto, Philippe se marcha definitivamente de París aumenta ante la presencia de cajas de cartón que las televisiones francesas han mostrado delante del palacio de Matignon, sede de la jefatura de Gobierno. No obstante, Philippe y su actual equipo seguirán gestionando los asuntos corrientes hasta que se nombre un nuevo Ejecutivo, según ha indicado el Palacio del Elíseo en un comunicado.

Por su parte, Macron ha declarado en una entrevista que ha dado a la prensa regional francesa este viernes, que la confianza entre él y Philippe es total. El presidente ha hablado de un nuevo equipo para comenzar una nueva fase de la legislatura tras la pandemia de coronavirus, pero no ha revelado quien la dirigirá.

Es cierto que, pese a la buena relación que aseguran, en los últimos meses ha habido tensiones entre ambos. En especial, se han enfrentado por la reforma de las pensiones donde el primer ministro se ha mostrado más inflexible frente a los sindicatos moderados crispando la negociación. Y más recientemente también por la gestión de la Covid. En las encuestas, los franceses responsabilizan de los problemas al presidente, mas que al jefe del Ejecutivo.

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Phillipe, procedente de la derecha moderada, llegó por sorpresa al primer ejecutivo de Macron, que quiso abarcar desde la derecha moderada a la socialdemocracia en sus filas. Tres años después, Philippe es mucho más popular que el presidente de la República y en un sondeo reciente los franceses muestran su deseo de que permanezca.

Un giro más social y medioambiental

Macron, cuyo partido 'La República En Marcha' acaba de sufrir un duro varapalo en las elecciones municipales, corre un gran riesgo prescindiendo del máximo colaborador en la legislatura. De cara a las presidenciales en dos años, Philippe podría aglutinar más fácilmente a los centristas y, probablemente, a toda la derecha, que en la actualidad se encuentra descabezada.

En ese sentido, La remodelación gubernamental se daba por descontada tras la segunda vuelta de las municipales del pasado domingo, pero la llegada del nuevo equipo puede retrasarse todavía varios días. Philippe fue elegido en esas elecciones alcalde de su ciudad, la portuaria Le Havre, cargo que debería de asumir el próximo sábado. Macron, que ha admitido que cambiaría su Gobierno en una entrevista publicada esta mañana en la prensa regional, se ha mantenido hermético en lo que se refiere a la suerte de Philippe.

El presidente ha manifestado en muchas ocasiones que desea dar un giro más social y medioambiental a su política para los dos años que le restan en el poder antes de las presidenciales previstas para la primavera de 2022. El ahora primer ministro en funciones puede dar un paso atrás y consagrarse a la Alcaldía de Le Havre, puesto que ocupaba cuando Macron le eligió para dirigir su Ejecutivo tras su victoria en las presidenciales de 2017.