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María Luisa Segoviano, la magistrada que ha roto uno de los techos de cristal de la Justicia

La magistrada se ha convertido en la primera mujer en presidir una sala del Tribunal Supremo

En España hay más juezas que jueces pero la tendencia se invierte en Audiencias Provinciales, Tribunales Superiores y el Supremo

María Luisa Segoviano en su comparecencia ante el CGPJ / CGPJ

María Luisa Segoviano en su comparecencia ante el CGPJ

Madrid

María Luisa Segoviano (1950) se ha convertido en la primera mujer que preside una sala del Tribunal Supremo. Un Consejo General del Poder Judicial en funciones ha sacado adelante, entre otros, su nombramiento con 19 votos a favor y 2 votos en blanco convirtiendo a esta magistrada de Valladolid en la nueva presidenta de la sala de lo social después de un tiempo ocupando el puesto de forma interina tras la jubilación de su predecesor, Jesús Gullón.

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Se trata de la primera mujer que rompe uno de los múltiples techos de cristal instaurados desde hace años en la carrera judicial. En la actualidad, según los datos del CGPJ, hay más juezas (2.902) que jueces (2.439) y la última promoción que acaba de tomar posesión está formada por 33 mujeres y 29 hombres. Los cifras demuestran cómo la presencia de magistradas se va diluyendo hasta prácticamente desaparecer en los puestos más altos, con Segoviano siendo por el momento la única presidenta de sala del Tribunal Supremo.

Según los últimos informes del Consejo en juzgados de primera instancia hay 505 mujeres y 323 hombres y en los juzgados de lo penal hay 240 mujeres y 137 hombres. La tendencia, sin embargo, se invierte de forma drástica si examinamos los datos de organismos colegiados: en las Audiencias Provinciales hay 583 hombres y 370 mujeres  y en los Tribunales Superiores de Justicia 378 hombres y 316 mujeres. El Tribunal Supremo deja un balance de 61 hombres y 14 mujeres.

El primer año en que se registró por primera vez la presencia de más mujeres que hombres en la carrera judicial fue en 2013 y la diferencia no ha hecho sino aumentar desde entonces. Segoviano es una de esas 14 mujeres que ocupan un sillón del Tribunal Supremo y se ha convertido en la primera que preside una sala del alto tribunal en más de doscientos años de historia.

Con perspectiva de género

Segoviano, magistrada del Tribunal Supremo desde 2006 y jueza desde 1987, explicó en los micrófonos de Hora 25 con Aimar Bretos el pasado mes de febrero una sentencia de la que fue ponente y que reconoció a las mujeres españolas que el tiempo que pasaron en la Sección Femenina de la dictadura puede computarse a efectos de la jubilación anticipada. "Resulta un poco llamativo que tantísimos años después de que se ha aprobado la Constitución todavía persistan normas que son directamente discriminatorias, contemplan una situación o una cierta ventajas que se concede a los hombres al servicio militar obligatorio pero en paralelismo no se reconoce algo similar a las mujeres".

Su única rival, la magistrada Lourdes Arastey, también ha destacado en la última década por haber impulsado la perspectiva de género a la hora de estudiar asuntos laborales y de prestaciones. Fue ella la que ejerció en diciembre de 2009 como ponente de una sentencia pionera que reconoció a una mujer los periodos de cotización por parto a la hora de acogerse al extinto Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez. Ya dijo en esa sentencia hace más de una década que "el colectivo afectado (pensionistas de SOVI) está integrado fundamentalmente por mujeres y que, a mayor abundamiento, si no acreditan ulteriores trabajos y cotizaciones bajo la vigencia del sistema de Seguridad Social es, también mayoritariamente, porque abandonaron el mercado laboral a consecuencia de su matrimonio y ulterior maternidad".

 
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