Kyle Walker, víctima de racismo, tras ganar la Carabao Cup: "¿Cuándo va a parar esto?"
El jugador inglés del Manchester City denunció en su perfil de Instagram estos lamentables insultos, haciendo evidente que esta lacra continúa en la actualidad
La lucha contra la desigualdad social en todos sus aspectos en el mundo del fútbol parece ir por el camino correcto, sin embargo siguen existiendo episodios más relacionados con un tiempo lejano y otra época distinta en la que los derechos humanos no estaban garantizados como lo están ahora. Las protestas en EE.UU. surgieron como una respuesta a la violencia policial hacia la raza negra, un movimiento que conmovió al mundo y que se expandió por todo los escalafones del mundo actual: desde la política hasta el deporte.
Con todo lo que ocurrió la pregunta en nuestro deporte era evidente: ¿Sigue existiendo el racismo en el fútbol actual? Pues episodios como del que ha sido víctima Kyle Walker, jugador del Manchester City, tras ganar la Carabao Cup, no demuestra otra cosa que todo el trabajo que queda aún por hacer en la sociedad futbolera.
El jugador inglés tras proclamarse campeón de la Carabao Cup, por cuarta vez consecutiva, tuvo que leer un vergonzoso mensaje racista en su Instagram, que poco después denunció en su perfil: "¿Hasta cuándo, Instagram?", citando a la red social.
En toda estos lamentables sucesos se encuentra la guerra que entre las redes sociales y los clubes ingleses están envueltos. Ya que apenas hace unos meses, y en respuesta al poco control de estas sobre el ciberacoso y el racismo, los clubes británicos decidieron establecer un boicot que se produciría próximamente para que Twitter, Instagram o Facebook replanteasen sus estrategias para erradicar de una vez el racismo en sus redes sociales.
El fútbol británico y sobre todo, los jugadores de raza negra que juegan en la Premier League llevan mucho tiempo siendo acosados: Anthony Martial, Marcus Rashford o Alexander Arnold han sido algunos que lo han denunciado. Ahora Kyle Walker es una nueva víctima de esta lacra social.
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