Samantha Hudson critica que en el colegio te enseñen los reyes godos y no a gestionar tus emociones
La cantante e influencer ha hecho una reflexión y una crítica al sistema educativo sobre la necesidad de aprender a gestionar las emociones desde el colegio, al igual que te enseñan a dividir
Madrid
"Cuando se te rompe el alma y no puedes más, tiene que haber plazas en la sanidad pública". Hace ya varios meses, concretamente el pasado mes de marzo, el líder de Más País Íñigo Errejón pedía al Gobierno que actualizara la estrategia nacional de salud mental para ayudar a las miles de personas que están sufriendo las consecuencias de la "pandemia de la salud mental". Una pandemia invisible, que afecta principalmente a las nuevas generaciones, que muchas personas han obviado hasta ahora.
¿De qué manera afecta a los millennials y a la generación Z? este martes en nuestro canal de Twitch han hablado sobre ello el propio Íñigo Errejón, con la activista Samantha Hudson y con las psicólogas Noelia Vargas y Paula Jimeno. Hudson ha puesto en manifiesto la importancia que tiene que desde el colegio, enseñen unas herramientas para aprender a gestionar emociones, al igual que te enseñan a sumar o dividir.
El teléfono te ayuda a dividir, pero no con tu salud mental
La actriz ha explicado que el sistema educativo actual te enseña matemáticas, historia, pero no puedes aplicarla en el día a día, y sin embargo algo tan necesario como la gestión de emociones, con lo que te encuentras a diario, no esté encima de la mesa del plan educativo. "Te enseñan a dividir, y me da igual, porque eso lo hace el teléfono, pero herramientas psicológicas no me las da una maquina y eso es súper necesario" ha explicado.
Los ataques de ira, la envidia, la frustración, son emociones por las que cualquier persona pasa a lo largo de su vida, incluso varias veces, y Hudson ha querido señalar la importancia que tendría que desde el colegio te facilitaran estas herramientas para "centrarte en lo que más te importa y enfrentarte a los conflictos desde una posición realmente estable".
A veces estas visibilizaciones que hacen las generaciones más jóvenes, que reivindican una educación sexual, afectiva, que demandan que se les explique lo que es el amor o la frustración, puede chocar con la idea de algunas personas, que terminan haciendo referencia a la "generación de cristal", un término que se utiliza para desvalorar la visibilización que hacen los jóvenes sobre algunos asuntos y que, como ha explicado la actriz "no tienes por qué saber gestionar".