El sueño de Emerson: "Mamá, quiero ser como Dani Alves y jugar en el Barcelona"

Barcelona

Emerson Royal, el nuevo fichaje del Barça, ha jugado dos años en el Betis hasta llegar al Barcelona. Pero su lucha empezó mucho antes, cuando era un niño que vivía en las calles de Americana, un municipio de Sao Paulo. “Lo que me viene a la memoria cuando veo ahora a Emerson es todo lo que luchó, todo lo que buscó, siendo perseverante y creyendo en el mismo”, asegura Tania Ferreira, la madre de Emerson.

“Él nunca necesitó que yo hiciese nada por él, siempre se buscó la vida. Cuando yo no podía hacerlo él lo hacía y eso fue muy bueno porque luchó mucho y no necesitó a nadie para conseguir lo que consiguió”, cuenta una madre orgullosa que define a su hijo como “una persona muy determinada desde pequeño”.

La determinación de Emerson le llevó a uno de los momentos más felices de su vida el 2 de junio de 2021, cuando el Barça anunció que pagaba los 9 millones necesarios para quedárselo en propiedad. “Pensé: Dios mío, ¿esto es real? ¿Es un sueño? No es que no creyera en el potencial de mi hijo, pero en la vida y sobre todo en el fútbol hay cosas que parecen imposibles”.

Tania Ferreira admite que cuando vio el anuncio “lloró mucho”. Y añade: “reí y luego volví a llorar. Inmediatamente di gracias a Dios”.

¿Y cómo lo vivió Emerson? Ferreira cuenta que el joven futbolista “también lloró” y que “el día que se ponga esa camiseta, estoy segura de que volverá a hacerlo, no podrá reprimir la emoción. A él no le gusta mucho mostrar sus sentimientos pero llorará porque estará cumpliendo su sueño: jugar en el Barça. Lo soñó, lo luchó y lo ha conseguido”.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Sus deseos de vestir de azulgrana se remontan a sus tiempos de infancia en Americana. “Mamá, quiero ser como Dani Alves y jugar en el Barcelona”, le decía Emerson a su madre. “Piensa así y lo conseguirás”, respondía ella. “Emerson siempre fue lateral o volante y en los videojuegos cogía a sus ídolos, Neymar y Alves”, confiesa Ferreira. Y Emerson repetía: “mamá, quiero ser como Alves y jugar en el Barcelona”. El sueño de Emerson se hizo realidad.