La ministra británica de Exteriores, Liz Truss, sustituye a Frost en las negociaciones con la UE
El cambio llega después de que Frost presentase su dimisión con "efecto inmediato" en una carta dirigida al primer ministro británico, Boris Johnson, en la noche del sábado
Liz Truss. / GettyImages (Leon Neal)
Madrid
La ministra británica de Exteriores, Liz Truss, se hará cargo de las negociaciones con la Unión Europea sobre la relación pos-Brexit, tras la dimisión de David Frost, informó este domingo la residencia oficial de Downing Street.
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Truss retiene su cargo de Exteriores y, al mismo tiempo, encabezará las negociaciones con Bruselas sobre el polémico Protocolo para Irlanda del Norte, acordado para evitar levantar una frontera física en la isla de Irlanda a fin de no perjudicar el acuerdo de paz (1998).
Por su parte, el diputado conservador Chris Heaton-Harris, que trabaja en la cartera de Transporte, pasa al ministerio de Exteriores como secretario de Estado para Europa, según han indicado desde Downing Street.
Dimisión por carta con "efecto inmediato"
El nombramiento de Truss se dio a conocer después de que Frost, que fue una figura clave en las negociaciones del Brexit, presentase en la noche del sábado su dimisión, con "efecto inmediato", en una carta dirigida al primer ministro británico, Boris Johnson.
En su misiva, Frost manifestó su inquietud por el "camino" que ha tomado el Ejecutivo conservador al aplicar nuevas restricciones en el Reino Unido para controlar el coronavirus, en particular la exigencia de presentar certificados COVID para entrar en grandes eventos, como discotecas, así como el aumento de los impuestos.
Seguirán las conversaciones con la UE sobre Irlanda del Norte
Truss tendrá que proseguir los contactos con la UE sobre el Protocolo para Irlanda del Norte, que estableció que la provincia británica queda dentro del mercado interior de la UE, pero los controles aduaneros deben hacerse entre Gran Bretaña y la provincia.
Sin embargo, Londres lleva meses retrasado esos controles porque el protocolo provocó el descontento de la comunidad protestante pro-británica de Irlanda del Norte.
