Pegasus: el argumento del Gobierno tiene fecha de caducidad

Madrid

No hay más explicaciones por parte del Gobierno del caso Pegasus. No hay novedades sobre si hay o no más espiados en el Ejecutivo, y todo lo que se sabe lo explicó aquí, el martes, el ministro de la presidencia, Félix Bolaños, que nos pidió no especular a la vez que no despejaba prácticamente ninguna de las dudas que todavía tenemos sobre este grave episodio.

Las miradas están puestas ahora, en la directora del CNI, a quien nadie defiende abiertamente en el gobierno, y en la agenda, también, una comparecencia, esta mañana, de la ministra de defensa en el Congreso, una prevista, sin fecha, del presidente del Gobierno, y nada de una comisión de investigación sobre el caso porque el PSOE y el PP lo han evitado. Mientras tanto indicios e informaciones que hablan de otros espionajes, a la entonces ministra de exteriores, Arancha González Laya, en plena crisis con Marruecos. Espionaje que entonces no se denunció. El diario The Guardian publica hoy que un único cliente de Pegasus pidió vigilar a 200 teléfonos españoles, el cliente, apunta el periódico fue Marruecos.

Es imprescindible que el Gobierno de más explicaciones, el argumento de que están en fase de investigar e intentar aclarar las cosas, tiene caducidad en el tiempo, no puede servir para siempre.

Y en la vertiente política de este caso, la inestabilidad de la legislatura. Va a ser difícil que el gobierno recomponga la confianza con algunos de sus socios parlamentarios. Ayer todos, incluido los que siempre son más moderados en los planteamientos, fueron contundentes en la petición de explicaciones al gobierno. Lo hicieron todos los que pasaron por la sala de prensa del Congreso, tras la junta de portavoces. Con Esquerra parece ya imposible, con el resto, el gobierno va a tener que trabajarlo.

El PP y Vox rozan la mayoría absoluta impulsados por la llegada de Feijóo

Y este panorama en el día que amanece con la encuesta que publicamos en la SER y El País que sitúa al bloque de la derecha y la ultraderecha, al PP y Vox, al borde de la mayoría absoluta. Se ve claro como los populares salen reforzados con el cambio de liderazgo, con la llegada de Feijoó, que consigue prácticamente un empate técnico con el PSOE, y todo esto a la espera de que se defina cómo queda ese espacio a la izquierda del PSOE que debería liderar Yolanda Díaz.

Le queda todavía tiempo a esta legislatura, pero ya saben que en la política los tiempos se pueden hacer o muy largos o muy cortos.