Slipstream, recuerdos de OutRun a toda velocidad
Los amantes de los juegos de carreras arcade en dos dimensiones cuentan ya en PS4, Switch, Xbox y PC con este nuevo título retro
SER Jugones 8x38: Slipstream, recuerdos de OutRun a toda velocidad
Fuenlabrada
Vivimos una época en la que los juegos de estilo retro, por jugabilidad o sus gráficos en dos dimensiones, viven una segunda juventud. Blasphemous, Windjammers 2 o Streets of Rage 4 son algunos ejemplos de grandes lanzamientos en los últimos años. Y ahora le toca el turno a Slipstream (Ansdor), un juego de carreras arcade inspirado claramente en el mítico OutRun de SEGA, y que nos transmite sensaciones tan geniales como su referente a finales de los 80.
Slipstream está disponible para PS4, Switch, Xbox One y PC (Steam) y nos propone recorrer a toda velocidad veinte trazados diferentes (urbanos, desérticos, subacuáticos…) a lo largo del mundo a bordo de cinco modelos diferentes de deportivos de los 80 y 90 inspirados en bólidos como el Lancia Delta o el Honda Type R -cada uno con atributos diferentes de manejo, velocidad y aceleración-. Su sensación de velocidad, esos túneles que atravesamos a más de 200 km/h. y unos controles sencillos sin complicaciones técnicas nos recuerdan sobremanera a OutRun.
Slipstream cuenta con tres niveles de dificultad y la propia velocidad del juego puede reducirse hasta un 50% para tener más tiempo de reacción y evitar las colisiones con otros coches o los bordes de la carretera. Además podemos personalizar el sistema de derrape para ponerlo en manual (más rápido y arriesgado) o en automático (menos aceleración), y manejar bien estos derrapes es la clave para ganar. En cualquier caso, si sufrimos un impacto fatal, podemos aprovechar el sistema de rebobinado incorporado para viajar cinco segundos al pasado y rectificar nuestro error.
Si hablamos de modos, Slipstream nos ofrece un Grand Tour con cinco niveles, coches rivales y bifurcaciones; Cannonball con carreras personalizadas con hasta 20 tramos encadenados, rivales y tráfico; Grand Prix con un campeonato de cinco carreras y personalización de coches; las carreras simples; carreras contrarreloj; y un Battle Royale con eliminación progresiva de los participantes. Audiovisualmente el juego está maravillosamente pixelado y maneja una paleta de colores pretendidamente saturada y vistosa. En cuanto a sonido, los temas son puro arcade con bases electrónicas de sintetizador, perfectos para nuestros derrapes a toda velocidad. Sus textos están en inglés, pero esto no supone ningún impedimento para disfrutar del juego.
Una vez conocido todo esto, el conjunto adquiere todavía más valor si descubrimos que Slipstream es obra de un solo programador: el brasileño Sandro Luiz de Paula (Sandor). Su desarrollo comenzó antes de 2014, y gracias a un motor gráfico personal creado de forma autodidacta y sus diversas capacidades artísticas, el resultado global es sobresaliente. Slipstream es un juego muy divertido, desafiante, y que permite el juego competitivo en pantalla partida hasta para cuatro jugadores. El título ha sido adaptado para consolas por la empresa española Blitworks, y hemos conversado con Jesús Fabre, portavoz de la compañía para conocer más detalles del propio juego y de su autor. Hasta aquí el SER Jugones de esta semana, pasadlo bien.