Jaén

Es uno de los momentos más esperados de las semanas previas a la campaña de aceituna en la provincia de Jaén. El año pasado fue a finales de septiembre, en el marco de la feria Expoliva, y este año se ha hecho esperar algo más, unas dos semanas. Finalmente, este lunes, 3 de octubre, la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha presentado esta mañana el aforo del gobierno regional, esto es, las previsiones que espera el ejecutivo de Juan Manuel Moreno, unas previsiones que, como se temía, son malas debido a la sequía y las altas temperaturas.

El descenso es notable ya que nuestra tierra afronta una cosecha con un desplome del 60% (un descalabro siete veces mayor que hace 12 meses) en cuanto a la producción con 200.000 toneladas de aceite de oliva que llegarán de las 937.000 toneladas de aceituna que los jornaleros recogerán de los olivos, una cifra que baja por debajo del nivel psicológico del millón de toneladas. La media de los últimos cinco años es prácticamente similar al porcentaje de este año al caer llega al -59,8%.

A nivel regional, habrá unos tres millones de toneladas de aceituna que generarán 587.000 toneladas de aceite. Si nos fijamos por provincias, hay caída en los ocho territorios andaluces siendo Jaén, el principal productor, el que lidera las caídas con ese 60% indicado anteriormente. Seguidamente están Córdoba con un 47,3% y Granada con un 41,4% menos respectivamente.

Jornales

La importante reducción de la producción tiene otra notable consecuencia como es el menor número de jornales que habrá en los próximos meses en el campo jienense. En las labores de recolección se prevén casi 1,7 millones, un 34,2% del total de la comunidad autónoma. A ello hay que sumar otros 81.500 jornales en labores de molturación. En la región, el cálculo llega a los 13,8 millones, un 20% menos que en la campaña 2021/2022. Por todo ello, hace unas semanas, UGT pidió la eliminación de jornales para cobrar el subsidio mientras que el PSOE ha propuesto un plan de empleo extraordinario a la Junta. Por el momento, solo la Diputación ha aprobado una medida similar con 10 millones de presupuesto.

En este sentido, la responsable de Agricultura ha señalado que la consejera de Empleo, Rocío Blanco, está estudiando con el gobierno nacional posibles medidas que ayuden a minimizar el daño económico como los planes de empleo especiales, algo que, asegura, "lo ve de forma positiva como no podía ser de otra manera". Sin embargo, no se ha concretado nada más, por el momento.

Reacciones

Como suele ser habitual, a los pocos minutos de conocerse estos datos, las principales organizaciones agrarias ofrecen su punto de vista. El máximo responsable de UPA en Andalucía y Jaén, Cristóbal Cano, se refería al importante daño económico que se espera ya que "en la provincia de Jaén se perderán más de 1.200 millones de euros" para mostrarse también preocupado por "el empleo, los millones de personas que se van a quedar sin tajo".

Por otra parte, Juan Luis Ávila, secretario provincial de COAG, adelantaba que se va a producir "una tormenta perfecta en el sector del aceite de oliva" debido al incremento de los costes de producción y al aforo publicado este lunes. De esta manera, aseveraba que "nos deja totalmente contra las cuerdas, necesitamos un paquete de medidas por parte de la Consejería que ya se lo hemos trasladado".

El gerente y portavoz de Asaja Jaén, Luis Carlos Valero, ha cargado contra las políticas hídricas del ejecutivo de Pedro Sánchez criticando que "es una falta de voluntad manifiesta por el interés del olivar en la provincia de Jaén". Además, pedía que se retrase la entrada en vigor de la PAC y lamentaba que "hemos visto que los seguros del olivar se los cargaron hace muchos años y ahora es cuando realmente harían falta" para concluir que "era lo que nos podía dar cobertura frente a esta catástrofe por sequía y no sirve para nada".

Otras medidas

Carmen Crespo también ha enumerado otras peticiones de la Junta. Se ha referido a la denominada como 'Medida 23' que se debe aprobar en Europa tras la petición del gobierno español una vez que el Consejo de Gobierno de su visto bueno en su reunión semanal de los martes. Se trata de un mecanismo que vaya dirigido a los "sectores afectados especialmente por la situación de sequía". Por último, ha reclamado que el olivar "especialmente el tradicional, sea considerado un ecoesquema 'per sé'" dentro de la futura Política Agraria Comunitaria que entrará en vigor en 2023.