"Los operarios no están para recoger basura del suelo": comienza la 'campaña de la silla' en Santa Cruz de Tenerife

Santa Cruz de Tenerife

Se comprometió y, tras dos aplazamientos, ha comenzado a cumplir. El concejal de Servicios Públicos y primer teniente de alcalde de Santa Cruz de Tenerife, Carlos Tarife (PP), inició su particular 'campaña de la silla' la pasada tarde en el barrio de Los Gladiolos. Él mismo se va a sentar en los puntos negros de la ciudad. Es decir, aquellos en los que algunos ciudadanos depositan residuos en la calle, fuera de los contenedores habilitados. Hace un mes y medio existían en la capital chicharrera 29 de estos focos. Tras el anuncio de la iniciativa, según el edil, ya se han reducido a 25: "Ayer recibíamos un informe de la empresa Valoriza y de los 24 puntos restantes hay otros cinco que están a punto de desaparecer porque efectivamente se está depositando menos basura de manera indebida".

El concejal asegura que esta campaña con la que intenta "levantar conciencias" irá acompañada de un dispositivo de inspectores y de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife. También se reparten folletos informativos en los barrios. Preguntado por la reciente reorganización de los contenedores en las calles capitalinas, Tarife ha aseverado que "están a menos de 200 metros de cada domicilio" y que no existe ninguno que se haya trasladado más de 80 metros. Insiste en que "hay algunos a menos de 12 metros y, sin embargo, sigue habiendo actitudes que no son coherentes". El edil llama por ende a los vecinos infractores a reconducir su conducta porque "la función de los operarios de limpieza no es recoger basura en el suelo, sino desde los contenedores".

El primer teniente de alcalde también señala que la reunificación de los contenedores se ha llevado a cabo para que se pueda reciclar: "Animo a las personas que desarrollan estas acciones incorrectas a que no lo hagan, que se sumen a lo que están haciendo la mayoría de los chicharreros, intentar que esta ciudad cada día esté más limpia".

Más de 50 multas desde 2023

Y es que incumplir la Ordenanza Municipal de Gestión de Residuos y Limpieza de Espacios Públicos puede acarrear severas sanciones. De hecho, desde enero de 2023, cuando se puso en marcha, hasta la actualidad se han puesto más de 50 multas según anuncia Tarife. La norma municipal penaliza el depósito de residuos fuera de los contenedores; el vertido de los mismos sin embolsar salvo el vidrio, papel y cartón; cualquier desperdicio desde los coches; derramar agua sucia de las limpiezas en la vía pública; alimentar palomas, ratas o gatos callejeros; o acciones como defecar y orinar en la calle.

La Ordenanza contempla sanciones de entre 2.000 y 100.000 euros en el caso de las infracciones graves. Una de las últimas multas, de 2.500 euros, se ha impuesto a una vecina precisamente por dar comida a las palomas. Al respecto, Tarife advierte de la existencia de una empresa que ya realiza un control poblacional en la ciudad.