Así será el nuevo CATE de Arrecife: Módulos 'tipo ONU' y fin de las ‘casetas provisionales’

Arrecife

El Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) de Arrecife se someterá a una remodelación completa, tras años de denuncias por sus condiciones precarias. Así lo ha confirmado Marcos Santiago, portavoz y secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) de Canarias, en declaraciones a SER Lanzarote.

Santiago adelantó que el nuevo recinto contará con módulos habitables 'tipo ONU', diseñados para ofrecer mejores condiciones de alojamiento a las personas migrantes que llegan a las costas lanzaroteñas. “Se van a poner unos contenedores tipo habitable, como los que usa la ONU en los campamentos, con literas interiores, camas, baños y duchas”.

El portavoz subrayó que la obra supone una reestructuración total del terreno, con instalaciones más dignas tanto para los migrantes como para los agentes encargados de su custodia y tramitación.

Además, el proyecto incluirá una infraestructura policial fija que permitirá realizar los procedimientos de identificación y extranjería sin depender de traslados entre el CATE y la comisaría. “Se va a montar una infraestructura ya estable, fija y en condiciones”, añadió el representante sindical.

El nuevo CATE mantendrá o ampliará su capacidad

Durante las obras, se habilitará un espacio provisional en un solar contiguo, con capacidad algo menor, pero una vez finalizada la reforma, el nuevo CATE mantendrá e incluso aumentará el número de plazas actuales.

Según el portavoz del SUP, la previsión es que, en el futuro, se pueda ampliar la capacidad para hacer frente a eventuales picos de llegada de pateras. “De momento la cantidad va a ser igual. Está previsto en un poquito más en el futuro, sí, efectivamente, aumentar el número de plazas”, puntualizó Santiago.

El proyecto supone un paso importante para Lanzarote, donde la presión migratoria se ha mantenido constante en los últimos años.

En 2024, la isla fue uno de los principales puntos de llegada de pateras a Canarias, y el antiguo CATE —construido de forma temporal con casetas y vallados metálicos— fue objeto de críticas por parte de la Fiscalía y de organizaciones humanitarias debido a las condiciones “indignas” del recinto.

Una vieja demanda policial y social

El Sindicato Unificado de Policía llevaba años reclamando una mejora en las instalaciones. Las condiciones precarias afectaban no solo a los migrantes, sino también a los agentes encargados de la identificación y custodia, que en numerosas ocasiones tuvieron que improvisar espacios de trabajo y alojamiento temporal en la propia comisaría.

Con la nueva infraestructura, se espera que el dispositivo policial gane eficacia y que el proceso de identificación sea más ágil y seguro. “Ya se montará una infraestructura más propia de la Policía para hacer toda la documentación y todo estará centralizado”, indicó Santiago.

Un salto cualitativo tras años de improvisación

El nuevo CATE de Arrecife marca un antes y un después respecto a los improvisados campamentos que durante años funcionaron en la isla. El uso de módulos tipo habitables, similares a los empleados por Naciones Unidas, busca garantizar condiciones humanas y dignas mientras las personas migrantes permanecen bajo custodia policial.

Aunque el proyecto no resuelve por sí solo los desafíos estructurales de la gestión migratoria en Canarias —como la falta de recursos humanos o la saturación en momentos de crisis—, sí supone una mejora sustancial en la infraestructura de acogida y trabajo policial en Lanzarote.