Los pescadores de València piden más apoyo institucional para un sector que está ahogado por los problemas

València

El presidente de la Cofradía de Pescadores de València, José Manuel Pastor, alerta de que el sector en la ciudad está en una "muy mala situación" debido a todos los problemas que arrastran desde hace años, y que no se solucionan. A problemas estructurales como la falta de relevo generacional o de apoyo institucional, se suma ahora la inflación, que hace bajar la rentabilidad del sector. Pastor ha explicado este sábado en Hora 14 Valencia que, en la actualidad, hay seis barcos de arrastre y once de trasmallo que salen a faenar siempre que el tiempo lo permite en València, pero en otros tiempos, hace muchos años, llegó a haber hasta 80 buques de arrastre.

Los pescadores celebran este domingo, 16 de julio, el día de su patrona, la Virgen del Carmen y en València se ha organizado una misa, a las diez de la mañana, tras la que la imagen de la virgen saldrá en procesión, en un buque, por el mar, en unos actos que también incluirá un homenaje a las personas fallecidas en el mar. El presidente de la Cofradía de Pescadores asegura que el sector sigue activo en la ciudad de València, pero reconoce la incertidumbre provocada por los problemas que existen.

El sector de la pesca, contra las cuerdas

Piden más apoyo institucional

Una de las cuestiones que siguen sin resolver es el futuro de la propia lonja de pescadores. Su ubicación actual es provisional desde que se construyó el entorno de la Marina de València para acoger la Copa América en 2007, pero ni el puerto de València ni el Ayuntamiento de la capital han dado todavía una solución definitiva. José Manuel Pastor alerta además de que ahora el puerto les pide el pago de un cánon que haría "inviable" el mantenimiento de la actividad. Espera poder hablar pronto con el nuevo Gobierno local de València para buscar soluciones.

El presidente de la Cofradía ha detallado que otro de los problemas que arrastran es el de la inflación, que ha hecho aumentar el precio del gasoil y también ha provocado que se reduzca el consumo de pescado entre las familias. El resultado, asegura, es que el beneficio es cada vez menor y, como consecuencia, tampoco hay relevo generacional, ya que los más jóvenes no se ilusionan por el negocio de la pesca. Calcula que, si se comenzaran a resolver algunos de estos problemas, la Cofradía de Pescadores de la ciudad podría aumentar su flota hasta los 14 o 15 barcos de pesca de arrastre.