'Olé mis huevos', el plato icónico del chef Pablo Ministro

Valencia

El chef de Contrapunto Les Arts, Pablo Ministro, ha viajado por segundo año consecutivo al corazón rural de Polonia para compartir los sabores de la cocina valenciana con el alumnado de una escuela de la pequeña población de Rudka, de apenas 1.000 habitantes. La escuela está situada en un espectacular palacio barroco. Pablo Ministro nos cuenta que ha estado acompañado por Álvaro Larrauri, jefe de cocina de Contrapunto Les Arts, un espacio de Gourmet Catering & Eventos, con el que ha impartido cinco jornadas de formación a un grupo de jóvenes estudiantes, muchos de ellos procedentes de contextos familiares desestructurados.

La acción forma parte del programa Erasmus, a través del cual esta escuela mantiene desde hace años un convenio con Gourmet Catering & Eventos y su restaurante Contrapunto Les Arts, donde cada año reciben en prácticas a estudiantes polacos y de otros países europeos.

Si el año pasado fue la paella y el all i pebre, en esta ocasión el chef ha diseñado una formación en la que se han trabajado platos como el ajoarriero, la titaina, la paella valenciana o los buñuelos de calabaza, combinando técnicas tradicionales con recursos adaptados a los ingredientes locales.

Olé mis huevos

Para la receta necesitamos huevos, jamón, trufa y patatas. Se hace un puré de patatas, con mantequilla y algo de nata, que quede bien cremoso. Encima, los huevos escalfados. Y con un sofrito de ajo, pan duro y jamón se tritura todo para que quede "como unas migas trituradas". Por ese orden, se coloca en el plato, y por encima algo de cebollino, o sal del Himalaya. La trufa fresca de Teruel, también por encima, de forma generosa. Si hay por casa un caldo de cocido, se puede añadir por encima. Según el chef, "todo chuf chuf" completa más el plato.

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