Etta Eyong; cláusulas, plusvalías y obligaciones de una venta millonaria para el Levante

Valencia

El Levante apostó muy fuerte por la contratación de Etta Eyong y su valor de mercado se ha disparado hasta los 20 millones de euros con 5 goles, 3 asistencias y su nueva internacionalidad con Camerún.

Tal y como les adelantó la Cadena SER, el Levante pudo cerrar el fichaje de Etta Eyong gracias a un aval personal que el consejero delegado, José Danvila depositó en la LFP por valor de 5 millones de euros.

El espíritu de la operación firmada entre el Levante y el Villarreal se fundamentó en la revalorización de un activo deportivo por la escasa participación que el delantero tendría con Marcelino tras el fichaje de Mikautadze y en los beneficios económicos que ambas entidades podrían repartirse con la explosión del goleador camerunés en LaLiga.

Etta Eyong llegó para convertirse en un jugador determinante en el objetivo de lograr la permanencia y aprovechar la oportunidad que le brinda el Levante para cambiar su cotización pensando en el futuro.

El Villarreal accedió, el último día del mercado, al traspaso del 100% de los derechos del delantero camerunés por un precio de 3 millones de euros cuando estaba exigiendo 6 millones, porque si lo mantenía en su primera plantilla terminaría devaluando un activo muy importante y porque las condiciones del contrato de Etta se modificaban de forma automática con un cambio de cláusula de rescisión que estaba fijado en 10 millones de euros.

El Levante se garantizó el valor deportivo de Etta Eyong con un contrato por las cuatro próximas temporadas, pero sabiendo que su fuerza negociadora ante una posible explosión del jugador concluye en el instante que un club deposite 30 millones de euros que figuran en su cláusula de escape.

Plusvalías, tanteo y obligaciones

El Levante y el Villarreal diseñaron una operación de pura ingeniaría financiera para que un futbolista que el submarino amarrillo valoraba en 6 millones de euros fuera traspasado por solo 3 millones de euros y sabiendo que la mitad de esa cantidad le pertenecía al Cádiz que poseía el 50% de los derechos económicos.

Los diferentes escenarios que dibujarán el futuro económico de una posible venta de Etta Eyong están pautados en función de una serie de parámetros fijados a partir de las plusvalías que se generen por encima de los 3 millones que ya desembolsó el club granota.

Si la oferta que se acepta está entre los 3 y los 7,5 millones de euros, el 80% de la plusvalía sería para el Villarreal y el 20% para el Levante.

En el caso de que le venta se establezca entre los 7,5 millones y los 15 millones ambas entidades percibirían el 50% de la plusvalía y si el Levante lo vende por encima de los 15 millones, el 80% de la plusvalía sería para la entidad granota y el 20% sería para el Villarreal.

No obstante, el consejero delegado del Villarreal, Fernando Roig Negueroles se reservó un derecho de tanteo ante las diferentes ofertas que el Levante pudiera recibir. Si el submarino amarillo decidiera ejecutarla y Etta regresa a La Cerámica, el Cádiz no cobraría ninguna cantidad pero mantendría el 50% de los derechos económicos a futuro.

Según ha podido saber la Cadena SER, si el Villarreal no ejerciera ese derecho y la propuesta oficial que reciba el Levante supera los 15 millones de euros, pero la desestima porque prefiere retener al jugador en Orriols, el Villarreal le puede exigir a Danvila el pago inmediato de las plusvalías que se generen en función del valor de esa oferta y sin esperar a una venta posterior.

Si el Levante traspasase este próximo verano al jugador por el valor de su cláusula, ingresaría 21,6 millones de euros, el Villarreal percibiría 5,4 millones adicionales a los 3 que ya ingresó por su salida de La Cerámica (8,4) y cuyo 50% abonaría al Cádiz.

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