Restaurando la historia de la Guerra Civil
Operarios del Cabildo de Gran Canaria trabajan en la restauración de documentos del archivo de Juan Negrín, incluyendo mapas de la batalla del Ebro
Las Palmas de Gran Canaria
El Cabildo de Gran Canaria trabaja en el delicado proceso de restauración y posterior digitalización de los planos originales de campaña y de guerra de los fondos del archivo de Juan Negrín, último presidente de la II República, que nunca antes habían sido desdoblados.
La valiosa documentación fue recepcionada en 2013 por la Institución insular, cuyo Taller de Restauración de Documentos de la Consejería de Cultura ejecuta los trabajos para la recuperación y conservación del legado del que fuera presidente entre 1937 y 1939 y, en el exilio, hasta 1945.
Se trata de documentos inéditos en su mayoría para los historiadores, que ahora podrán acceder a esta información que ya no se perderá, y en la que estuvo interesado el Archivo de Salamanca.
Las avanzadillas, la línea enemiga, fechas, cotas del terreno, sellos y secretos pueden observarse en los planos, algunos de varios metros y otros, de menor tamaño, que se adjuntaban al principal cada media hora o una hora, según el avance de la operación, se trata de documentos “emocionantes” y “dramáticos”, subrayó Carmen Negrín, quien celebró que vean la luz tras 70 años doblados.
Gran parte de ese legado se custodia en el fondo documental de la Fundación Juan Negrín, entidad que vela por la proyección de la figura del insigne político, único presidente del Gobierno de España nacido en Canarias.
Se trata de mapas de distinto tamaño, algunos de ellos de 14 metros de largo, elaborados meticulosamente con tinta de color por la Sección de Operaciones del Ejército Republicano para dar cuenta de la situación de las tropas, así como de los distintos frentes en los que se libraron las batallas entre ambos bandos. En este bloque de archivos también figuran numerosos documentos cifrados como secretos, que esperan a su estudio para su posterior catalogación.
Los planos originales han sufrido un largo periplo que en estos últimos 70 años los ha llevado de Madrid a Valencia, para posteriormente llegar a Barcelona y más tarde volver a ser trasladados a la ciudad de Toulouse, desde donde partieron con destino a Marsella y luego a París, ciudad gala desde la que fueron finalmente enviados a Gran Canaria hace dos años.