‘Los Papeles de Panamá’

La Línea de la Concepción

De tantas noticias como tenemos que digerir día a día, de tantos escándalos con los que nos tenemos que desayunar, de tantos casos de corrupción con los que nos vamos a la cama, el de los Papeles de Panamá parece que es el que afecta a más gente y , como se dice ahora, de forma más transversal.

Efectivamente; políticos, incluidos presidentes de gobiernos, todo tipo de profesionales, empresarios, artistas, deportistas, carpinteros metálicos, técnicos de lavadoras, etc. etc.

Aquí no se salva nadie, parece que en principio todo el mundo tiene una sociedad opaca en Panamá, hasta que no se demuestre lo contrario. Yo mismo estoy rebuscando entre mis papeles a ver si algún día por mediación de algún abogado, y sin yo saberlo, tuve allí en panamá alguna cosa dada de alta o si la tuve y ya no me acuerdo. Esto suele pasar, de hecho ahí está el ministro Soria que en principio no se acordaba de nada, hasta que poco a poco fue refrescando la memoria.

Se ha ido conociendo en estos últimos días, la aparición de nombres de personas y empresas campogibraltareñas que figuran en los famosos papeles de panamá, a través de la firma de abogados Mossack Fonseca.

Por ejemplo, el dueño de una venta de carretera en el término municipal de Jimena, que, por lo visto, tiene una sociedad offshore en dicho país, a través de la cual camufla los impuestos del ventorrillo.

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Las sospechas se confirmaron cuando un intrépido periodista de Algeciras, ocultado detrás de una higuera, estuvo comprobando como llegaban regularmente a la venta unas partidas de chorizo y asadura en manteca, con un anagrama y una etiqueta de Benaoján aunque detrás tenían marcados un sello con la bandera de Panamá, detalle este que no pasó inadvertido para el avispado plumilla, lo que le hizo pensar que dicha mercancía, incluida también la zurrapa de lomo, llegaba hasta Jimena vía Panamá; aunque para despistar en vez de llegar envuelta en papel de Panamá, venia envuelta en papel de estraza.

Con esta prueba irrefutable el periodista consultó los datos en poder de la agencia de periodistas internacionales de investigación y….. ¡bingo! Allí estaba el nombre de este empresario, que de momento yo no puedo desvelar su identidad pero les adelantare que en la Estación de Jimena le llaman el “follapavas”.

Por otro lado, también es vox populi, aquí en la línea, que una persona muy conocida en el pueblo, que vende en el piojito y en los puestos de la plaza, dio de alta en su momento una sociedad en la isla de Jersey porque el vende en el piojito jerseys de cuello de pico y también para echárselo por encima de los hombros.

Otro caso muy cercano a la zona es el de una empresa radicada en Medina Sidonia. Esta también tiene dada de alta una sociedad offshore en Panamá a través de la cual evade sus impuestos. Se trata de una empresa que se dedica a la recolección y distribución del higo chumbo y que ejerce el control de más de mil quinientos puesto de chumbos durante la temporada. Se calcula que esta empresa debe al fisco unos doscientos mil euros. Cuando apareció en dichos papeles la palabra expresa de “higos” se creyó en principio que se trataba de una empresa que regentaba clubs de alterne pero luego se vio que a los “higos” que se refería eran en efecto higos chumbos.

Como pueden comprobar uno no sale de su asombro.

A nivel nacional, el caso de Imanol Arias y Ana duato no es nada extraño. Han amasado tanto dinero con la serie televisiva cuéntame, que el juez cuando hace unos días llamó a declarar a Imanol le dijo: “cuéntame” y entonces Imanol le conto al juez dos capítulos enteros de la serie que todavía no se han estrenado. Además le dijo que tanto él, cómo Ana Duato están muy contentos con los papeles que interpretan en la serie y que para que iban a querer ellos más papeles.

No sabemos lo que el juez habrá pensado, pero de momento le ha embargado la casa de Zahara de los Atunes.

Como les digo, este asunto afecta a toda clase de personas y a mí ya me esta obsesionando.

Hace unos días al pasar por un callejón detrás de la calle jardines había un chaval, que por cierto, acababa de hacer una pintada muy curiosa que decía: “ si quieres dejar la droga, déjala aquí” y había dibujado una flechita señalando un rincón. El chaval se estaba haciendo un porro de dos papeles; pues quieren creer ustedes que me acerqué a ver si era papel de fumar o papeles de panamá.

Lo que les digo yo me voy a volver majarón, si no lo estoy ya.