La canonización de un Obispo de Palencia cuestionado por la Memoria Histórica
La Profesora Carman García Colmenares dice que el Obispo "no se caracterizó por su caridad cristiana"
Palencia
Este es un día grande para la Iglesia de Palencia. Se produce la anunciada canonización del que fuera Obispo de la diócesis, el beato Manuel González. Pero no todos comparten la alegría del clero y no únicamente por no coincidir en creencias. Un sector, vinculado a la izquierda y a la Memoria Histórica, cuestiona los valores del canonizado por su postura afecta al régimen franquista. Desde este ámbito se considera más que evidente su colaboración y afinidad con los represores.
La polémica se desató cuando un informe de un experto incluyó el nombre del prelado en las placas a retirar de calles con nombres de reminiscencias franquistas, asunto que llegó a los tribunales y que prosperó mediante sentencia que condenó al Ayuntamiento de Palencia por no cumplir con la Memoria Histórica. El consistorio ha recurrido la sentencia y el Obispado no ha entrado en polémica, restando importancia a una placa.
Especialmente dura ha sido la profesora Carmen García Colmenares, cuyos trabajos sobre las maestras y maestros de la República son un auténtico referente, ha difundido un mensaje en el que es contundente: "Canonización de un Obispo que no se caracterizó por su caridad cristiana. En recuerdo de las maestras y maestros palentinos asesinados por creer que otra educación era posible. In memoriam".
En una línea muy similar se ha expresado el Grupo Municipal de Ganemos en el Ayuntamiento de Palencia. Este grupo llevó a Junta de Gobierno y ha difundido una carta que en su día escribió el prelado, nada caritativa con los opositores al régimen franquista, con duras palabras para los comunistas. Una carta que, a juicio de Ganemos, vendría a corroborar a qué lado estaba el Obispo que este domingo es canonizado.
En el otro lado, está el ámbito institucional, el que rehúye la polémica y entiende que hay motivo para la celebración. Las principales autoridades, y hasta el Ministro del Interior se suman a una delegación de más de 200 personas que entienden que es un día de gozo, de celebración; un día en el que el beato Manuel González sitúa a la Iglesia de Palencia en el mapa al ser canonizado. Sin duda, toda una metáfora de que las "Dos Españas" se resisten a desaparecer.