"Mi primer servicio lo hice con falda y tacones"

Murcia

Ella fue una de las tres mujeres que ingresaron en la Región en la Guardia Civil en 1988. Maria Dolores Abenza es una de las 197 mujeres que integran la primera promoción en este cuerpo militarizado que conmemora en este 2018 sus tres décadas de presencia femenina en sus filas.

Y mucho ha llovido, pues cómo recuerda en nuestra antena, esos inicios fueron tan improvisados como entrañables. "Realizábamos el servicio en falda y tacones puesto que no había otra uniformidad prevista para las mujeres", nos cuenta, recordando como tanto los compañeros como la sociedad vivieron esa presencia femenina en este cuerpo policial como una auténtica revolución: "los turistas se hacían fotos con nosotras".

Como curiosidad, cuando hizo el examen de ingreso en el cuerpo, tuvo que dormir durante un mes en una tabla de madera para poder dar la altura exigida -sólo le faltaba medio centímetro-.

Dice que en la Guardia Civil no hay brecha salarial, y tampoco ha sufrido el denominado techo de cristal, aunque reconoce que la maternidad sí ha frenado su posibilidad de promoción, pero no por nadie, sino por ella misma.

De cómo les recibieron los compañeros y la propia sociedad, de su tradición familiar -es hija y hermana de Guardia Civil-, o de cómo se concilia hablamos con Maria Dolores Abenza, una mujer que cumple tres décadas de servicio en un cuerpo que lleva en las venas.