Fiscalía y acusación mantienen que Juan Cano es el "único autor intelectual posible" de la muerte de Ponsoda

Alicante

El juicio por el asesinato del alcalde de Polop Alejandro Posoda en 2007 encara su recta final. Este jueves la sesión que se sigue en la Audiencia Provincial se ha dedicado a que las partes expongan sus conclusiones. Fiscalía y acusación particular mantienen que Juan Cano es el "único autor intelectual" y mantiene la pena de 25 años de prisión para él. Mientras, las defensas de los siete acusados insisten en la libre absolución de sus defendidos ante la "ausencia de pruebas".

La representante del Ministerio Fiscal, Lourdes Giménez-Pericás, además mantiene la petición también de 25 años de cárcel para los otros tres acusados considerados autores intelectuales del crimen: el empresario Salvador Ros, el dueño del club de alterne Mesalina, Pedro Hermosilla y el gerente del local, Ariel Gatto.

Los cuatro se pusieron en contacto con los tres supuestos sicarios: Raúl Montero, Radim Rakowski y Robert Franek, para quienes pide 27 años de prisión al añadir dos años por tenencia ilícita de armas.

Lo tiene claro Fiscalía, Cano, entonces edil de Urbanismo, actuó movido por el odio hacia la víctima y por la ambición de acceder a la alcaldía. Fue un crimen "por ambición, encargado y pagado". A Alejandro lo asesinaron sin posibilidad de que se defendiera, ha mantenido.

Y si bien no hay testigos directos, ni se han encontrado las armas del crimen, ha pedido al jurado que sopesen los indicios incriminatorios, según ella, para emitir su veredicto.

Ante el jurado ha defendido también la declaración del testigo protegido y ha puesto de manifiesto como casi todos los testigos han detallado la mala relación que existía entre el regidor y Juan Cano. También ha defendido Giménez-Pericás la investigación realizada "desde finales de 2007 hasta mediados de 2010". Ha asegurado que los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil "estudiaron todo y lo investigaron todo", desde las amenazas recibidas por Ponsoda por parte de "vecinos con conflictos" hasta todo lo relacionado con la "vida sentimental" de la víctima.

Por su parte, el letrado de la acusación particular, Vicente Guerri, que también se ha ratificado en su escrito inicial, ha suscrito la argumentación de Fiscalía y ha destacado que el testigo protegido, además, ha sido capaz de interconectar a todos los acusados, a los que ha descrito como "personas sin escrúpulos".

Este jueves ha dado tiempo a que expongan sus conclusiones algunos de los letrados de los siete acusados. Antes, han solicitado a la presidenta del tribunal que no se tomara en consideración a las acusaciones y que se declarara nulo el juicio por falta de pruebas.

El abogado que representa a Raúl Montero, José María Borja, ha tratado de desmontar los argumentos de las acusaciones cuestionando la fiabilidad de la investigación puesto que no hay prueba alguna y la del testigo protegido, "era un confidente de la Guardia Civil de Villajoyosa al que dejaron de dar credibilidad tras varias mentiras", ha dicho, "y que ocultó la supuesta autoría de los hechos durante dos años".

El lunes 3 de febrero está previsto que el jurado comience su deliberación.