Por los bosques de pinos rodenos de Henarejos en busca de pinturas rupestres
El abrigo del Tío Modesto de este pueblo de Cuenca se descubrió en 1996 y dos años después fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco
Cuenca
En el espacio Nos vamos de excursión que coordina Fernando Carreras de la empresa EcoExperience, y que emitimos los viernes en Hoy por Hoy Cuenca, vamos a conocer otro de los abrigos rupestres de la provincia de Cuenca. Más allá de las pinturas prehistóricas de Villar del Humo, existe un abrigo en Henarejos al que merece la pena llegar.
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Para llegar al punto de partida de esta ruta seguiremos, desde Cuenca, la carretera N-420. Pasamos Fuentes, Carboneras de Guadazaón, Pajaroncillo y cogemos el desvío a Boniches. De ahí seguimos por Campillos Paravientos, Fuentelespino de Moya y el siguiente pueblo es ya Henarejos. Una vez allí, lo mejor es dejar el coche por la plaza donde está la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Desde allí debemos seguir los carteles que nos indican el camino hacia el Abrigo del Tío Modesto.
Salimos del pueblo y en breve veremos que nos metemos ya en un pinar de rodenos caracterizado siempre por sus rocas de color rojizo y sus troncos granates, entremezclados, con vegetación de jaras y enebros. Continuamos por una pista que cada vez se comienza a hacer más rocosa y difícil para el paso de vehículos, es por ello que recomendamos ir andando desde el pueblo.
La pista empieza a subir ligeramente una pendiente y debemos ir atentos ya que veremos a mitad de la misma un desvío a mano derecha que nos lleva hasta el abrigo. El lugar está bien adaptado con escaleras y una barandilla. Si lo seguimos veremos al fondo el Abrigo del tío Modesto. Hay un cartel con información aunque por el sol se encuentra bastante deteriorado.
Según nos cuenta don José Dimas, vecino del pueblo y la persona que acompañó a visitarlas por primera vez a los Agentes Medioambientales que las descubrieron y que propuso proteger las mismas con una valla metálica, el tío Modesto era un pastor del pueblo que durante mucho tiempo guardo su ganado en este abrigo, de hecho vemos una puerta de piedras a la entrada y un muro que lo cierra. Durante muchos años el tío Modesto no se percató de la existencia de las pinturas y la importancia de las mismas.
Estas pinturas corresponden al arte rupestre levantino y están declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1998. Se pueden observar figuras superpuestas de diferentes etapas. Predominan las escenas de caza con arcos y flechas en actitud de disparo en escenas de cabras y ciervos, además de pinturas esquemáticas. Lo que más nos llama la atención es el detalle que presentan y los trazos finos de algunas de ellas, percibiéndose perfectamente las patas de los animales e incluso las cuernas de los ciervos. Las pinturas fueron descubiertas en 1996.
Desde este punto podemos seguir caminando por la senda en la que encontraremos algunas formaciones curiosas de rodenal, parecido a las Coberteras de Pajaroncillo o volver al pueblo, haciendo un total de unos 11 kilómetros.