Las protestas de los agricultores provocan cortes de tráfico en la AP-4 dirección Jerez

Imagen de la protestas de los agricultores en la AP-4 a la altura de Lebrija / Ana Huguet

Asaja-Sevilla, COAG Sevilla, UPA Sevilla y Cooperativas Agro-alimentarias de Sevilla están protagonizando este martes un paro general del sector agrario y ganadero de Sevilla y se han desarrollado cuatro concentraciones-tractoradas en defensa del futuro del campo. Estas protestas están provoncando cortes de tráfico en la autopista AP-4 entre los kilómetros 53 y 54, en dirección Cádiz.
Asaja-Sevilla, COAG-Sevilla, UPA Sevilla y Cooperativas Agro-alimentarias han trasladado que esta convocatoria cuenta con el apoyo explícito de Asemesa, Asociafruit, Asema, CEA, FAC, la Federación de Arroceros de Sevilla, la IGP aceituna manzanilla y gordal de Sevilla, así como decenas de ayuntamientos de la provincia.
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Tren de voces de agricultores
La protesta se enmarca en la campaña nacional de movilizaciones en la que está inmersa el campo español desde el 28 de enero y que ya ha llevado ya a la calle a miles de agricultores de Almería, Málaga, Córdoba, Cádiz, Granada y Jaén.
Las organizaciones convocantes demandan precios dignos para todas las producciones al trasladar que "los precios actuales son ruinosos", así como "un equilibrio justo de la cadena agroalimentaria" por cuanto han estimado que "hay que frenar la especulación a costa de los agricultores y ganaderos".
Las organizaciones agrarias reclaman "una reducción de los costes de producción" al manifestar que "nos asfixian, mientras nuestros precios caen en picado", y de igual forma han planteado un salario mínimo interprofesional (SMI) "ajustado a la realidad del campo".
Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias han reclamado "defensa frente a la competencia desleal absoluta" por la entrada de productos de países terceros, de los que advierten "que llegan además sin ningún control".
Los convocantes han exigido también protección frente "a las barreras comerciales y los aranceles injustos y discriminatorios (aranceles americanos, veto ruso, brexit) que nos expulsan del mercado", así como "la dignificación social de nuestra actividad, que no puede soportar más ataques injustificados".
Por último, las organizaciones convocantes han esgrimido que "los agricultores y ganaderos generamos empleo estable y riqueza en las zonas rurales, proporcionamos alimentos sanos y de calidad", por lo que han apuntado que "no somos el problema, sino parte de la solución".




