La comunidad educativa intenta mantener la normalidad

Ourense

Mientras aguardan el final de la cuarentena, la prioridad de las asociaciones de padres pasa en estos momentos por garantizar que todos los estudiantes mantengan su servicio, tanto a nivel de refuerzo de estudios como en lo tocante a los comedores.

Confapa Galicia celebraba una reunión telemática para articular una solución temporal, que permita a quienes disponen de una beca comedor el recibir en su domicilio al menos una comida al día a través de una distribución en frío. Jose Antonio Álvarez, presidente de FAPA Ourense, explicaba a Radio Ourense Cadena SER que, entre la educación pública y concertada hay más de cuatrocientos alumnos afectados solo en la ciudad de Ourense.

Los contenidos para el alumnado han empezado a distribuírse a través de las plataformas online disponibles en los centros educativos. Tanto la enseñanza pública como la concertada se consideran preparadas para mantener la formación de los estudiantes más allá de los quince días iniciales que se han establecido de cuarentena. Desde el Colegio Miraflores, su directora, María Díez, nos contaba que casi han logrado mantener una situación de normalidad a pesar de no estar impartiendo las clases presencialmente, si bien reconocía que el sistema necesitará ajustes, que irán solventando conforme surjan.

A los más pequeños también les toca adaptarse, y lo que más les cuesta estos días es entender la prohibición de salir a la calle por un lado, y el hecho de que el no acudir al aula no signifique el fin de los deberes. Así lo contaba una madre de dos niños, de tres y seis años, resaltando sobre todo lo importante que es mantener rutinas en casa, aunque resulte complicado, y el improvisar se haya vuelto herramienta imprescindible.

Tanto asociaciones de padres como comunidad educativa han manifestado su total compromiso a cumplir con sus responsabilidades cívicas para que esta situación excepcional se resuelva de la forma más satisfactoria posible.