Réquiem Hispania: Una bodega de garaje

Saber es conocer. Y cuando se sabe hacer vino, es sencillo llegar a triunfar. Esa puede ser la fórmula que ha llenado de éxito a la bodega peñafielense Réquiem Hispania. Una bodega de garaje, como así se autodefine, su puerta es “una trasera”. Posee un almacén independiente y climatizado donde habita un parque de 150 barricas. Pero la peculiar historia de esta bodega la conocemos de cerca con Pablo Miranda.

A pesar de la evolución de la Ribera del Duero en los últimos 30 años, ahora más que nunca la bodega pensaba en reflexionar sobre la variedad tempranillo, y se les ocurrió hacer algo diferente.

Porque particularidades tiene muchas, pero Requiem Hispania se caracteriza por sus vinos, colosales y especiales. Por eso, si tuviéramos que quedarnos con uno para brindar nos costaría mucho. Pedimos apoyo a Pablo.

En definitiva, hablamos de unos vinos muy especiales. Llamativos, con sentido y con mucha peculiaridad. Peculiaridad de un vino de garaje, que hace que Requiem Hispania, sea muy singular. Brindemos, porque los mejores momentos están por llegar.