Más del 20% de madrileños está en riesgo de pobreza o exclusión social

Madrid

José Ignacio tiene 62 años, pero no puede subsistir sin la ayuda de su madre. Tras trabajar a lo largo de su vida, de manera intermitente, en el sector servicios y también cuidando a personas mayores, tuvo que parar cuando le detectaron un cáncer. La operación le impidió poder reincorporarse al mercado laboral y desde entonces sobrevive como puede. Hace unos meses, la Comunidad de Madrid le concedió la Renta Mínima de Inserción: 450 euros. Un respiro que no alivia sus dificultades para llegar a fin de mes. José Ignacio es uno de los casi millón y medio de madrileños que están en riesgo de pobreza o exclusión social, según datos de 2019 publicados por CCOO, recogidos de la Encuesta de Condiciones de Vida del INE.

Uno de cada cinco ciudadanos de la región, o lo que es lo mismo, más del 20% de madrileños, está en riesgo de pobreza, según datos de la Tasa AROPE en 2019. Se trata de un incremento anual del 10%. CCOO denuncia que Madrid es la comunidad más desigual porque “la riqueza que se genera en la Comunidad no llega a las personas con necesidades, sino que se concentra cada vez en menos manos, dibujando una sociedad extremadamente fracturada y dual”. Se considera que un hogar está en umbral de pobreza cuando los ingresos que percibe son iguales o inferiores a 9.629 euros anuales si solo se trata de una persona o de 20.150 euros si es una familia. Son casos de pobreza severa cuando una persona cobra 6.417 euros al año o una familia 13.476 euros.

En este último nivel, de pobreza severa, se encuentra José Ignacio. Al año percibe 5.400 euros provenientes de la Renta Mínima de Inserción (RMI). Esta ayuda es la que la Comunidad de Madrid concede a personas de entre 18 y 65 años que tienen cero ingresos. Es el equivalente comunitario al Ingreso Mínimo Vital. José Ignacio paga un alquiler de 300 euros porque su casero le ha mantenido una renta baja, que “no sabe cuánto durará”. Con los 450 euros de RMI no puede cubrir todos los gastos de su hogar, como pagar comida o facturas. “Mi madre me da 200 euros de ayuda”, confiesa. Aún así, llegar a fin de mes se convierte en una odisea: “Vivo de una forma que me dan ganas de llorar. No puedo permitirme absolutamente nada. Ir al cine o tomar un café simplemente no sé en qué consiste”.

Según el informe de CCOO, hay un 8% de hogares con retrasos en el pago de la vivienda, un 53,8%  más. También hay un 3,4% de madrileños que no pueden comer carne o pescado cada dos días. Un dato que se ha incrementado en un 25% en un año. José Ignacio cuenta que para él “es un lujo asiático” adquirir alguno de estos productos. “Para mí, cinco euros, que la gente no podría ni comprarse nada en la calle, yo le saco más partido”, asegura. En su caso, las legumbres se convierten en parte de su dieta habitual debido a su bajo coste. Aún así, a menudo tiene que acudir a ayudas de organismos como la Iglesia o comedores sociales para poder alimentarse.

Pobreza por categorías

El informe de CCOO desgrana en varias categorías los principales datos de pobreza de la Comunidad. Todos ellos sin tener en cuenta el impacto de la pandemia, que según sostiene Manuel Rodríguez, secretario de Políticas Sociales del sindicato, “lo agravará todavía más”. Por rango de edad, los peor parados son los menores de 16 años. En concreto, hay 267.711 niños y niñas que están en riesgo de pobreza, más de un cuarto de la población total. Los mayores de 65 años en peligro de exclusión social se han incrementado en un 72%, con más de 197.000 personas.

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Por sexo, el estudio resalta que se ha recortado la brecha salarial entre hombres y mujeres, aunque estas últimas siguen siendo las más empobrecidas, sobre todo, entre los 30 a 44 años. En esta franja de edad hay un 17,8% de mujeres en riesgo de pobreza, cuatro puntos más que los hombres. Este tramo precisamente coincide con el momento de plena edad laboral, que también se solapa con el inicio de la maternidad. De hecho, la edad media a la que se es madre por primera vez se sitúa en 2020 en 31,22 años.

Por tipo de hogar, el riesgo de pobreza en las familias monoparentales se eleva al 38,4%. Aquí la mujer de nuevo es la más damnificada, ya que un 82,8% de estos núcleos familiares lo componen madres. En cuanto a situación laboral, hay más de 380.000 personas que son pobres a pesar de tener un trabajo, mientras que alrededor de 150.000 familias tienen a todos sus miembros en paro. Según denuncia CCOO, “el empleo ha dejado de ser una garantía de suficiencia económica y de cobertura de necesidades básicas”.

En la propia Comunidad también hay datos, que para el sindicato, confirman el aumento de la desigualdad. La renta media por hogar en el barrio más pobre de Madrid capital es en San Cristóbal (Villaverde) y asciende a 20.365 euros anuales. El más rico es El Plantío, con 89.215 euros. Una diferencia de 68.850 euros. Por municipios, Pozuelo de Alarcón es el que tiene más renta media, con 90.902 euros, mientras que en Villanueva de Perales esa cifra no llega a los 19.600 euros anuales.

Falta de recursos sociales

La secretaria general de CCOO en Madrid, Paloma López, considera estos datos “una vergüenza” porque suponen “ser pobre en la Comunidad más rica”. López critica que la región “es la que menos invierte para atender a las personas en situación de pobreza”. Según explica el sindicato, el RMI llega cada vez a menos gente y su cuantía es muy precaria. La media de esta ayuda es de 350 euros al mes, siendo Madrid el territorio con el PIB per cápita más elevado de España en 2019. CCOO asegura que el Gobierno regional, además, no gasta todo el dinero presupuestado para cubrir esta prestación.

Como posibles soluciones para paliar “la pobreza estructural”, que según López, padece la región, la sindicalista propone aumentar la RMI de los 350 euros de media a unos 700 euros, elaborar “unos presupuestos sociales y justos”, que se contemplen dentro de un pacto entre Gobierno y agentes sociales, o crear un plan de vivienda para ayudar a los más necesitados. López insiste en que recuperar los recursos perdidos en los años de “recortes en sanidad, educación y servicios sociales” es clave para superar el índice de pobreza de la Comunidad de Madrid, que no ha bajado del 19% en la última década.