Iribar, su último partido en la despedida de San Mamés
Muchos seguidores pudieron decir eso de: "Yo vi jugar a Iribar "
Iribar en la despedida de San Mamés
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El mayor emblema de la extensa historia del Athletic nació en Zarautz el uno de marzo de 1943. José Ángel Iribar, el jugador que más veces ha vestido la camiseta rojiblanca en partido oficial, está a punto de cumplir 80 años. Para celebrarlo, repasamos los diez momentos que marcaron su carrera, dentro y fuera de los terrenos de juego.
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Capítulo X: la despedida de San Mamés
Emoción, lágrimas, palmas, cánticos, pero sobre todo orgullo de pertenencia. El hasta siempre de San Mamés del 5 de junio de 2013 fue espectacular por el mensaje de pasado, presente y futuro, superó las expectativas. El 5 de junio de 2013 es una fecha que todxs lxs aficionadxs zuri-gorris recordarán, el día que se jugó el último partido en el viejo San Mamés. Aquel día en el que muchos, muchas, pudieron decir aquello de: "Yo vi jugar a Iribar".
San Mamés cerró sus puertas a la competición oficial con el que fue el partido oficial número 1.738 del primer equipo rojiblanco ante el Levante, que terminó, por cierto, con derrota. Según estadísticas que dio a conocer el club bizkaino, el balance en el antiguo San Mamés fue de 1.154 victorias del conjunto rojiblanco, mientras que 317 terminaron empatados y en 268 se impusieron el rival del Athletic. En todos esos encuentros, el Athletic marcó 4.314 goles y recibió 1.737.
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Antes de la despedida de San Mamés ante la Selección de Bizkaia, ''La Catedral'' aún acogió un choque más. El el de vuelta de la primera eliminatoria de ascenso a Segunda División que disputó el filial rojiblanco, el Bilbao Athletic, ante el Levante B el 2 de junio de 2013.
Broche de oro en San Mamés: Iribar jugó los últimos minutos
En cuanto al partido, tanto el Athletic como el equipo de Bizkaia comenzaron con sus mejores onces, el de Marcelo Bielsa el habitual en las últimas jornadas de aquella temporada y mientras en el bizkaino formaron de inicio con los únicos jugadores de Primera de los 19 futbolistas convocados: Beñat Etxebarria, entonces del Real Betis, y Mikel Rico, del Granada.
En palabras del presidente rojiblanco de aquella época, Josu Urrutia, la opción de jugar contra la selección de Bizkaia fue la primera que se barajó cuando se constituyó la comisión que se ocupaba de elaborar los actos de despedida, pero no fue hasta última hora cuando el club de Ibaigane se puso en contacto con la Federación de Bizkaia para hacerles la proposición en firme.
Urrutia explicó que el club se había dirigido a varios clubes y selecciones para intentar buscar rivales para este partido de despedida: "Hablamos con varios equipos y todos ellos nos han agradecido que hayamos pensado en ellos", pero, según Urrutia, "las conversaciones no han llegado más allá por temas de agenda y disponibilidad".
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Sin la rigidez táctica de la competición oficial, el partido, sin embargo, deparó una primera mitad con escasas llegadas a ambas áreas y todas ellas desbaratadas con solvencia tanto por Iraizoz como por Goitia. En el descanso, ambos equipos cambiaron casi su fisonomía por casi por completo. Bielsa dio entrada a siete jugadores, todos los convocados excepto Fernando Llorente, y la selección de Bizkaia refrescó su equipo con cinco jugadores.
En el minuto 66 se adelantó la Selección de Bizkaia en el marcador gracias a un remate de Alain Arroyo, jugador por aquel entonces militaba en el Mirandés y socio del Athletic, tras una buena jugada por la izquierda del entonces jugador del Barakaldo, Unai Medina.
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El equipo rojiblanco intentó nivelar el marcador y a punto estuvo de conseguirlo con un remate de Isma López que sacó sobre la línea de gol Koikili, en el 74, y en un disparo de Toquero que se marchó fuera por poco en el 83. El resultado era lo de menos y lo mejor estaba por llegar con esa salida escalonada de Orbaiz, Andrinua, Guerrero, Dani y, la explosión final, con la llegada de el 'Txopo' a la portería de Ingenieros mientras 'La Catedral', al unísono, le dedicaba el legendario 'Iribar es cojonudo'. La llegada a la portería y el ritual del de Zarautz tocando el larguero de la portería con su saltito característico, fue de los más apoteósico de la noche.
Raúl Fernández-Cavada, entonces portero del Athletic y ahora en el Granada, recuerda con cariño aquel momento. "Era el último partido que se jugaba en San Mamés, fue un día muy bonito, ambiente festivo y con la sorpresa que entrarían al campo leyendas del Athletic. Lo que no me esperaba es que entrase el mismísimo Iribar. Fue un lujo y un honor abrazarme con él cuando salió al campo"
Una noche mágica
Aquel miércoles de junio 40000 aficionados rindieron homenaje en San Mamés a 129 exjugadores, 9 extrenadores y a muchos años de historia zuri-gorri.
El primer gran momento del primer acto fue la salida al campo de dos veteranísimos como José Mari Maguregui y Rafa Iriondo, quien salió acompañado por Koldo Agirre, Javier Irureta, Jose Ángel Iribar, Iñaki Sáez, Txetxu Rojo, José Mari Amorrortu y José Manuel Esnal 'Mané' dentro del grupo de entrenadores.
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Todos ellos, rodeando el círculo central, escucharon el himno del Athletic interpretado en directo por la Banda Municipal de Bilbao antes de abandonar el terreno de juego entre el pasillo que formaron los jugadores del Athletic y de la selección bizkaina que disputaron ese último partido en San Mamés.
Una vez concluido el partido, San Mamés quedó en silencio y bajo la oscuridad, buscando un ambiente íntimo sobre el que ilustrar un recuerdo imborrable de uno de los estadios de mayor solera del fútbol mundial. Un espectáculo de luz y sonido precedió a la salida de voluntarios al césped, que formaron un '100' en honor a los años del estadio, un 'agur' y una zamarra rojiblanca, simbolizando el adiós al mítico campo.
Un espectáculo de luz y sonido con fuegos artificiales sirvió para echar el telón definitivo a San Mamés antes de empezar a ser demolido para acometer la última fase de construcción del nuevo estadio.