Tras meses de negociaciones en el seno del Ejecutivo, este martes el Consejo de Ministros ha dado luz verde al anteproyecto de reforma de la ley del aborto. El Ministerio de Igualdad quiere tramitar la norma por el procedimiento de urgencia para que pueda entrar en vigor el año que viene y contempla, entre otras medidas, las bajas por menstruaciones dolorosas, un derecho que no está reconocido en ningún otro país europeo. «Es una ley que representa muy bien este gobierno de coalición. Somos el primer país de Europa que comienza a hablar de esto», explicó el lunes en la SER la ministra de Igualdad, Irene Montero, que este martes ha agradecido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «su apuesta para que este sea un gobierno feminista» que se sitúa en la vanguardia de los derechos de las mujeres a nivel internacional. «Con este Gobierno las mujeres van a poder desarrollar sus proyectos de vida», ha sentenciado. La ministra portavoz, Isabel Rodríguez, ha señalado que esta ley supone «un nuevo avance para nuestra democracia» y ha recordado que este gobierno fue el que devolvió el derecho a la reproducción asistida a las mujeres monoparentales y parejas homosexuales. Una de las medidas que se ha quedado en el tintero en esta ocasión es la reducción del IVA en los productos de higiene femenina, pero la ministra de Igualdad ha remitido a los próximos Presupuestos Generales del Estado para poder hacerlo efectivo. Montero estima que la batería de reformas que se van a llevar a cabo esta vez supondrán una inversión de 104 millones de euros. Concretamente el permiso preparto en la semana 39 ascenderá a unos 57 millones de euros, las bajas por reglas incapacitantes, unos 23,8 millones, y la dispensa en institutos y centros penitenciarios de productos de anticonceptivos, unos 300.000 euros.