Muere la reina Isabel II de Inglaterra a los 96 años

Este jueves por la tarde se ha conocido que la reina Isabel II de Inglaterra ha fallecido a los 96 años en la residencia veraniega de la Familia Real, situada en Balmoral, Escocia, tal y como ha confirmado la Corona británica por medio de su cuenta de Twitter. Se trata de un hecho histórico y de gran trascendencia no solo en Reino Unido, sino en todo el mundo. Tras más de 70 años al frente como reina, Isabel II ha vivido numerosos episodios de gran trascendencia y es uno de los personajes más importantes del siglo XX.

Además, pasa a ostentar el segundo reinado más largo de la historia, solo por detrás del de Luis XIV, que estuvo 72 años al frente. Así, la familia Real británica ha comunicado su adiós de la siguiente forma: "La Reina ha muerto en paz en Balmoral esta tarde. El Rey [Carlos de Inglaterra] y la Reina Consorte [Camilla Parker-Bowles] permanecerán en Balmoral esta tarde y regresarán mañana a Londres. Jueves. 8 de septiembre de 2022".

Su estado de salud había ido empeorando en las últimas semanas y durante la mañana de este jueves el Palacio de Buckingham emitió un comunicado inédito en el que informaba de que los médicos que asistían a la reina Isabel II estaban "preocupados" por su salud, así como que la monarca estaba "bajo supervisión médica". Era la primera vez que se daba a conocer con tanto detalle el estado de la reina, lo que hacía presagiar la gravedad de la situación.

Además, a lo largo de todo el día han ido acudiendo a Balmoral todos los integrantes de la Familia Real y, cerca de una hora y media después de la llegada del último convoy, en el que viajaban los hijos de la reina, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo, así como su esposa, Sofía de Wessex, y también el príncipe Guillermo, se ha hecho pública la noticia de la muerte de Isabel II. Miles de ciudadanos han acudido a los alrededores de la residencia principal de la reina en Londres para mostrar su apoyo y llorar la pérdida. Su adiós ha provocado una auténtica conmoción entre la población inglesa debido al gran apoyo con el que contaba, siendo un referente para miles de ciudadanos.

Así, tras 70 años y 214 días ostentando el trono de Reino Unido, Isabel II ha fallecido y ahora será el príncipe Carlos el que herede el trono británico, ya que figura como el primer sucesor, pasando a convertirse en Carlos III. En su primer comunicado como monarca, Carlos ha señalado que es un momento "de profunda tristeza" tanto para él como para su familia. Además, señala que es consciente de que "su muerte será llorada por todo el país, así como los países de la Commonwealth y el resto del mundo".

La última aparición pública de la reina fue este martes, donde recibió a la recién nombrada primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, para encomendarle la formación de Gobierno. Esta reunión tiene por costumbre realizarse siempre en el Palacio de Buckhingham, pero el delicado estado de salud de la monarca obligó a la sucesora de Boris Johnson a trasladarse al palacio de Balmoral, en Escocia.

Un mandato histórico y un declive de salud que comenzó en abril de 2021

Isabel II arrancó su reinado en 1952 y a lo largo de todo su mandato ha vivido numerosos momentos históricos. Presenció de primera mano los instantes más tensos de la Guerra Fría, la desintegración de la Unión Soviética, numerosos conflictos en Oriente Medio como la Guerra del Golfo, la Guerra de las Malvinas, así como diversas crisis económicas, el proceso del Brexit y finalmente la pandemia de la COVID.

Además, han sido un total de 15 primeros ministros los que han sido recibidos por Isabel II en estos 70 años, y cuando ella fue coronada en 1952 no habían nacido ni la recién nombrada primera ministra Liz Truss, ni Boris Johnson, ni David Cameron ni Tony Blair.

Sin embargo, su estado de salud empezó a decaer en abril de 2021, hace más de un año, cuando falleció su marido, Felipe de Edimburgo. Ambos llevaban más de un año confinados en el Castillo de Windsor y en el funeral se pudo ver a una reina sola, vestida de negra y con mascarilla, velando el féretro, lo que fue percibido por la sociedad británica como el principio del fin de una era. A ello se le sumó la notable reducción de su agenda pública en favor del sucesor al trono, Carlos de Inglaterra, y del segundo en la línea de sucesión, el príncipe Guillermo.

Sin embargo, Isabel II dejó atrás la pandemia y tras ella incrementó su presencia pública, dando cierta esperanza a una población británica que le percibía como un auténtico referente en muchos aspectos. Su gran popularidad se evidenció el día de la celebración del Jubileo de Platino, que tuvo lugar el pasado 2 de junio, y donde miles de personas arroparon a la reina para celebrar sus 70 años al frente de la corona británica.

Así, tras este baño de masas, comenzó el goteo de informaciones que indicaban que su salud estaba empeorando. Cada imagen que se hacía pública era observada al milímetro por la opinión pública para obtener pistas sobre el estado real de Isabel II, y todas ellas hacían indicar que estaba decayendo. Finalmente, este martes protagonizó la recepción de Liz Truss como primera ministra y la imagen compartida reflejaba una mano mucho más oscura de lo habitual de la reina, lo que agrandaba la preocupación sobre su estado, pero muy pocos sospechaban que iba a ser su última aparición pública.

De esta forma, el 8 de septiembre de 2022 será una fecha marcada en el calendario por todos los británicos, ya que es el día en el que Isabel II cumplió la promesa que realizó cuando cumplió 21 años -cuatro antes de acceder al trono-, donde señaló que estaría al servicio de los británicos hasta el final de sus días, ya que a su juicio un monarca británico debe permanecer el trono hasta su muerte.