Rigoberta Bandini lo vuelve a hacer: dedica su nueva canción a su hijo y muchas madres se sienten representadas

Madrid

Muchos conocieron a Rigoberta Bandini con una canción dedicada a su madre que casi le lleva a Eurovisión y ahora presenta su primer largo con otra dedicada a su hijo. Ambos temas tienen algo en común: conecta al instante con quien las escucha. Sus letras están llenas de pasajes cotidianos que aterrizan su relato, curiosamente, muchos relacionados con comida: caldo en la nevera, boloñesa los domingos, freír un huevo frito... y es que ella reconocía este verano en una entrevista en La Sartén por el Mango de la SER que es "la peor cocinera del planeta" pero en cambio es una de las mejores compositoras españolas de este tiempo. Su secreto reside en su capacidad de llegar a la esencia —en este caso de la maternidad— para lanzar un mensaje real.

La Emperatriz, el primer disco de Bandini, que hasta ahora había preferido ir sacando singles que rápidamente se han convertido en éxitos. Ahora los ha agrupado en este trabajo y les ha puesto un lacito titulado Canciones de amor para ti, una de las pocas canciones inéditas del álbum en la que se desnuda por completo sobre lo que ha supuesto para ella la maternidad, con sus luces, sus sombras y mucho sentido del humor. El videoclip del tema es una sucesión de imágenes íntimas de la cantante y su pareja —el también músico Esteban Navarro— con su hijo. Vídeos que cualquiera que tenga niños en casa tendrá parecidos en su móvil. Por eso la historia que relata esta vez Rigoberta vuelve a ser universal.

Como en Ay, mamá o Perra, el feminismo está presente en su mensaje: "Que los hombres de este nuevo mundo lloréis bien tranquilos", canta en el estribillo mientras en toda la canción escenifica una maternidad alejada de la madre abnegada de antaño. En un momento dado del tema, se cuelan unas palabras, probablemente un audio de Whatsapp que la cantante compartió con alguien cercano intentando explicar lo que siente tras convertirse en madre: "Es muy fuerte porque yo antes de ser madre todo esto era 'a ver, la peña es una exagerada no puede ser tan heavy'. Bueno, se te multiplica como todo. Es como estar vivo con 2.000 tentáculos más, para lo bueno y para lo malo eh? A veces hay cosas que ¡ahhhh! dolor, miedos... pero ¡joder, es bestia! es que solo puedo escribirle canciones de amor a él. Estoy preocupada", explica en ese extracto. Y es que, como ella ha contado después, "hay mucho amor maternal en este disco" por el momento en el que está y le cuesta escribir sobre otra cosa: "¡Sacaría 12 discos hablando de él!", asegura.

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No es la primera que una artista dedica una canción a su hijo. Zahara le habla a su vástago en El Astronauta o Conchita vuelca sus deseos en El Viaje, por poner algunos ejemplos contemporáneos. Rigoberta Bandini ha dado un paso más allá con ese videoclip. Todo un regalo para Nico, con quien algún día verá las de Sorrentino y se acordarán de esta melodía.