Merichane supuso un antes y un después en la carrera musical de Zahara. Una brillante canción —para Fuego y Chinchetas, la mejor de 2021— en cuya letra detalla experiencias vitales muy íntimas y dolorosas: «Yo estaba ahí, dejándome hacer con tal de que acabase de una vez [...]. Yo estaba ahí, metiéndome los dedos hasta el fondo, queriendo vomitar las penas, la vida, el odio». Pero el tema estelar de Puta también incluye unos versos en los que la artista comparte una sorprendente confesión. «Yo estaba ahí dejándole las bragas usadas en el armario, jodiéndole la vida a un extraño». «Casi nadie me habla de esa frase y, sin embargo, para mí es una de las más importantes de la canción», asegura en una entrevista concedida a la Cadena SER. «Todo el rato estoy contando cosas que me han hecho y esa frase es mi forma de decir: ¡Cuidado, que yo también iba por ahí jodiéndole la vida a la peña!. No soy solo víctima. Soy víctima y verdugo, y asumo mi parte de culpa, aunque fuese la única manera que tenía de lidiar con lo que me estaba sucediendo, que era teniendo el control cuando entendía que los demás también lo iban a pasar mal». Zahara asume que su forma de contarlo es muy poco sutil porque, por si alguien tenía dudas, se trataba era de dejar unas bragas usadas en un armario, sabiendo que las iba a ver otra persona y que, evidentemente, iba a percatarse de que no eran suyas, con todo lo que eso conlleva. «No me da ningún miedo explicarlo porque esa era una de las válvulas de escape que tenía para resistir lo que me estaba pasando», asegura. «Hacerlo me generaba aún más sufrimiento, pero las víctimas no son solo víctimas. Todos somos ambas cosas, de la misma manera que juzgamos, aunque odiamos que nos juzguen. Hay que entender ese equilibrio y deshacerte de la culpa cuando eres tú el que convierte a otro en víctima». Al preguntarle si ese «extraño» ha escuchado la canción y se ha puesto en contacto con ella, Zahara responde sin complejos: «No era solo uno. Pero no me ha escrito ninguno de los que podrían haberse dado por aludidos. Yo creo que habrán pensado que se lo merecían y que, en realidad, lo hicieron peor. ¿Qué me van a decir?». En la entrevista concedida a Fuego y Chinchetas con motivo de la publicación de Reputa, el disco en el que versiona las canciones de Puta con artistas de distintos estilos (La Oreja de Van Gogh, Carolina Durante o Delaporte), Zahara aborda otros muchos temas, como los efectos de la polémica generada con su cartel del concierto de Toledo o el machismo al que, después de 20 años de carrera, se sigue enfrentando cada día. «Se anuncian ya muchos carteles de 2023 ¡y es que no hay ni una tía! Y es que joder, no estamos hace 5 años ni hace 10, estamos en un momento en el que aunque sea por vergüenza, ¡mete a tías en el cartel!», implora. Recuerda además el buen ambiente que se genera cuando hay mayoría de mujeres en un equipo: «Cambia tanto todo... la energía, las conversaciones... tiene que haber más mujeres, porque están ahí». En su equipo, le acompaña una jefa de monitores que vive a diario el machismo que sigue habiendo en su sector: «Noe es la persona que más sabe de sonido con la que he estado nunca. Cuando hay problemas técnicos, están todos los hombre mirando la mesa y va Noe y siempre lo arregla, pero si el problema sucede en monitores, va a llegar un hombre a decirle que no tiene ni idea de lo que está pasando. Ha tenido que llegar Sergio a darle credibilidad a Noe para que le hagan caso a ella para que resuelva el problema. Es la puta jefaza pero encima se tiene que reivindicar y encima, como está cabreada porque está ninguneada continuamente, lo que acaba pasando es que encima le dicen »¡Qué tía más borde!« ¡Es que encima tiene que ser maja porque el rol de la mujer es ser simpática y agradable! Pues mira, no. Es una tía seria que sabe hacer su trabajo y tú eres un puto gilipollas que no la respetas, así que no va a ser maja. Va a ser maja con las personas que lo merecen. Por eso me cabreo tanto... Como esta anécdota, te podría estar contando hasta que me fuera a dormir porque por desgracia esta es la situación que vivimos».