Gerard Piqué desvela que él no gritó el '¡es una puta vergüenza, me cago en tu puta madre!' que le costó la expulsión en su último partido como profesional

Gerard Piqué ha sido viral en la última semana por la canción que le dedicó Shakira. Los mensajes de la cantante colombiana y las respuestas del exfutbolista (en forma de chascarrillos y acuerdos con Casio y Twingo) coparon las portadas, pero tras el boom de la sesión 53 con Bizarrap, Piqué ha vuelto a hablar de su polémica expulsión ante Osasuna en su último partido como profesional.

El presidente de la Kings League ha pedido en Twitch respeto para los árbitros de la competición y para ello ha recordado su suceso con Gil Manzano en El Sadar. "Como presidente de la liga, una cosa es el show y protestar, y otra es faltar al respeto y cosas que no dan cabida dentro de esta liga. Lo he hecho toda la vida siendo profesional, con el show y lo que representa, por mucho que en Pamplona se pongan en mi boca palabras que yo no dije", declaró Piqué.

Al término de la temporada

Aprovechando su alegato en defensa de los colegiados, avanzó que dirá toda la verdad de lo que sucedió aquella noche. "Lo diré cuando acabe la temporada, nunca me he expresado así delante de los árbitros", confesó. El día al que se refiere Piqué es su último en una convocatoria con el Barça, donde Gil Manzano aseguró que el central tuvo que ser introducido en su vestuario por personal del club mientras le expresaba: "¡Es una puta vergüenza, me cago en tu puta madre!".

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"Me he quedado con ganas de que Piqué hubiese luchado porque es el mejor central del Barça"

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