Rodrigo de Bastidas, fundador de la primera ciudad de Colombia
Escribano y vecino del barrio de Triana (Sevilla), sintió el deseo de tomar parte en los viajes al Nuevo Mundo y se enroló en el segundo viaje de Colón a las Indias (1493). Más tarde, ya como capitán, partió en junio de 1500 desde el puerto de Cádiz y con él iba, como marino experto, el cartógrafo Juan de la Cosa, y también el joven Núñez de Balboa, que todavía le quedaban unos años para descubrir el océano Pacífico
COLOMBIA - 2012/04/27: Bolivar square in the old town of Santa Marta, Colombia with city hall in background. (Photo by Wolfgang Kaehler/LightRocket via Getty Images) / Wolfgang Kaehler
Bastidas atravesó las Antillas Menores, recorrió la costa venezolana y descubrió la costa atlántica de la actual Colombia, que no había sido vista todavía. Encontró la bahía de Santa María en 1502, recibido por los indios tayronas, divisó por primera vez las cumbres de Sierra Nevada, descubrió la desembocadura del río Magdalena, el emplazamiento de Cartagena de Indias, la bahía de Cispatá y el golfo de Urabá. Descubrió también la costa del Darién y los puertos de Retrete y Nombre de Dios, no muy lejos de la actual embocadura del actual canal de Panamá. Por esta razón a Rodrigo de Bastidas se le concede el mérito de haber descubierto Panamá.
Hombre bondadoso, trató con respeto a los indios, sin violencia y con trueques logró una enorme cantidad de oro, aunque también hiciera esclavos. Los navíos de su expedición fueron atacados por un molusco conocido por broma y Bastidas tuvo de dirigirse a Santo Domingo, en cuyas costas naufragó por un fuerte temporal, perdiendo todas las ganancias obtenidas por valor de cinco millones de maravedíes. El gobernador Francisco de Bobadilla lo procesó con falsas acusaciones, y fue absuelto en España por los Reyes Católicos. En recompensa de sus descubrimientos se le otorgó una pensión vitalicia de 50.000 maravedíes sobre los frutos de Urabá y Cenú.
Años después, tras un tiempo en Sevilla donde se casó y tuvo hijos, regresó de nuevo en Santo Domingo, con el puesto de almojarife, y en 1525 llegó con tres buques a la costa continental americana para fundar la ciudad de Santa Marta, primera población definitiva en la actual Colombia. Allí se inició su construcción el 29 de julio con unos 50 vecinos y para asegurarse la tranquilidad de la recién creada villa, hizo pactos con las distintas tribus de los alrededores (gairas, tagangas y dorsitos) intercambiando objetos de oro por utensilios. Algunos colonos le reclamaron que ese oro debía repartirse, pero Rodrigo de Bastidas se negó alegando que ese oro era para pagar los gastos de la expedición y financiar la construcción de la nueva ciudad.
Tal actitud y las privaciones que sufría la colonia, motivaron una conjura y su lugarteniente, Juan Villafuerte, intentó asesinarle, junto con seis hombres sublevados más. Herido de diversas puñaladas, dejó el mando a Rodrigo Álvarez Palomino y regresó a Santo Domingo para reponerse. Los vientos le llevaron a Santiago de Cuba, donde falleció a los pocos meses a la edad de 52 años. Palomino capturó a los asesinos y los envió a Santo Domingo, donde fueron juzgados y ahorcados.
Un hijo de Bastidas, llamado también Rodrigo, fue deán de Santo Domingo y obispo de Venezuela (1535) y de ahí pasó al obispado de Puerto Rico, para el que había sido elegido en 1539, donde murió.
