Ángela Quintas, experta en nutrición: "Se puede tener un ligero sobrepeso y estar sano con unas analíticas perfectas"

Madrid

La alimentación es un tema que preocupa a todos. Por salud o por estética, la mayoría de las personas hemos acudido en algún momento de nuestra vida a un especialista para controlar lo que comemos. Para hablar de nutrición tenemos en 'Hora 25' a Ángela Quintas, licenciada en Ciencias Químicas y con un máster en Dietética y Nutrición Humana. Todos los oyentes de la SER la conocen porque tiene un espacio en el 'A Vivir' y su propio podcast, '¿Cómo comes?'. También acaba de publicar el libro 'De la boca a tu salud', de la editorial Planeta.

¿La alimentación es una cuestión de salud o de placer? "Lo ideal sería que fuera más cuestión de salud que de estética", responde Ángela. "Cuando alguien propone bajar peso, lo primero que tenemos que ver es cómo están sus analíticas. Muchas veces asociamos un ligero sobrepeso a enfermedad y delgadez a salud, y eso no tiene por qué ser así. Podemos encontrar a alguien con un ligero sobrepeso con analíticas perfectas y a una persona delgada con unas analíticas que sean un desastre. Se puede estar sano con unas analíticas perfectas y un ligero sobrepeso".

A las mujeres la grasa se les acumula en las caderas y en las piernas, a los hombres en la panza: "Lo que nos pasa a las mujeres es que cuando entramos en la menopausia, esa caída de estrógenos que nos ha estado protegiendo a nivel cardiovascular frente a infartos y enfermedades hace que la grasa se nos empiece a acumular como se os acumula a vosotros. Ahí se dispara el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares", explica Quintas.

El hambre

¿Al cuerpo siempre hay que darle lo que pide? "Hay que saber escuchar al cuerpo porque te da muchas señales de lo que necesitas, pero no siempre hay que darle lo que pide. Hay que distinguir entre el hambre real y el emocional. El emocional es el de 'me lo merezco' y el real es cuando realmente el cuerpo te pide porque tienes una necesidad, tus niveles de glucosa en sangre están desplomados...", concreta.

El hambre generado por la ansiedad es terrible, dice la experta en nutrición. "La gente suele optar muchas veces por cosas que crujan, que te la metas en la boca y cruja: palomitas, caramelos... Todos estos alimentos ultraprocesados son ricos en grasas, en azúcares, que te producen un subidón tan grande que por eso enganchan. Son muy palatables e incluso a veces desprenden olor. Cuando tú abres una bolsa de patatas fritas, la bolsa cruje y, cuando la abres, ese olor a patata frita te tiene enganchado".

¿Hay que comer de todo? "No. No hay que beber alcohol, por ejemplo. Siempre les explico a mis pacientes que se imaginen que van a consumir 2.000 kilocalorías a lo largo del día. Tú puedes elegir que esas kilocalorías estén llenas de vitaminas, minerales, proteínas... O puedes consumirlas en forma de alcohol. En ambos casos estás cubriendo tus necesidades calóricas, pero en un lado te estás nutriendo y en el otro solo estás cubriendo tus necesidades energéticas. Entonces, ¿hay que comer de todo? No. Pero no pasa nada porque un día comamos alimentos que no deberíamos, importa lo que hagamos los 365 días al año", explica.

Mitos y trucos

¿Los hidratos de carbono engordan? "Primero hay que saber lo que son. Los hidratos de carbono son el arroz, la pasta, las frutas y las verduras. Lo ideal sería combinarlos siempre con una porción de proteína. No es lo mismo comerte una paella solo con verduras y una copa de vino, que te da una sensación de sueño y sopor, eso es un pico de insulina; que ir a un japonés que sales y dices 'ostras, he comido arroz con pescado pero me siento ligero', porque está muy bien hecha la combinación. Es una cuestión de combinaciones", responde.

¿Cenar solo una ensaladita? "Mal. Depende que lo que le pongas. Si le pones atún, bueno... Hay que meterle proteína". ¿La lechuga es mala por la noche? "Lo que pasa es que la lechuga de hoja grande produce muchos gases. Es una locura. Si quieres cenar algo verde, mejor canónigos, rúcula...". ¿Es malo comer un huevo al día? "No. Durante muchos años a los huevos se les demonizó mucho, pero se ha demostrado que se puede tomar un huevo al día. Hay gente que se toma una tortilla de un huevo y varias claras, porque en las claras es donde se encuentra toda la proteína y la grasa en la yema".

¿Puedo ir en ayunas a entrenar? "Mejor no. Yo iría siempre habiendo ingerido una pequeña porción de hidrato y proteína para que tengas un poco de hidrato almacenado en forma de glucógeno en tu músculo. Así, cuando tú empieces a entrenar, tu cuerpo utilice primero esa pequeña cantidad de glucógeno y luego ya empiece a utilizar la grasa", acaba respondiendo Ángela Quintas a esta batería de preguntas sobre mitos y prácticas alimenticias. "El mito este de que en la menopausia no se puede bajar peso o volver a la normalidad es mentira. Puede ser que te cueste un poco más, pero se consigue", remata para desterrar otro mito.

Dietas

"Yo no soy muy fan del ayuno intermitente. He visto que hay gente que dice 'ceno a las 20:00 y ya no como nada hasta las 14:00, pero ahora ya me puedo comer lo que quiera' y rompen el ayuno con un torrezno. Eso no es. Hay veces que se hacen malas interpretaciones de maneras de comer que sí tienen un fundamento científico", explica Quintas.

¿Cómo es la dieta de control de insulina que defiende Ángela Quintas? "Se basa en mantener tus niveles de glucosa lo más estables posible a lo largo del día. Eso produce dos beneficios: uno, en las analíticas, mejoran de manera inmediata; y dos, te sientes muy bien, llegarás cansado al final del día por tu actividad, pero no vas a tener esa sensación de sopor", concluye.